¿Qué harán las Farc tras captura de Santrich? Columna de opinión
Para los excombatientes rasos queda la incertidumbre tras la captura de Santrich.
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En menos de una hora, la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, partido político surgido tras la firma del acuerdo del Teatro Colón y luego de la entrega de armas, hará su pronunciamiento oficial luego de la captura anoche en una casa en el barrio Modelia, en el occidente de Bogotá, de Seusis Pausivas Hernández, más conocido como Jesús Santrich, congresista electo y exnegociador de paz, pedido en extradición por Estados Unidos por narcotráfico.
Vea también: ONU pide al Estado discernimiento en manejo de caso Jesús Santrich
Sin duda se trata del hecho más influyente en el futuro de la implementación del acuerdo de paz y la prueba ácida para saber si verdaderamente los exjefes de esa guerrilla y las bases de la misma, decidirán o no seguir adelante con el proceso, a pesar de que uno de sus máximos ideólogos, recordad por su irreverencia e irrespeto con las víctimas, esté prácticamente en el corredor de la extradición.
A primera vista, escuchando a Iván Márquez, a Victoria Sandino, leyendo al jurista español Enrique Santiago y a otros, queda claro que la reacción sería cerrar filas en torno a Santrich, denunciar un supuesto incumplimiento del acuerdo de paz y señalar que esto busca torpedear todo el proceso.
Sin embargo no queda muy claro si existe una real posibilidad de que las Farc regresen a las armas, toda vez que ya entregaron cerca de ocho mil fusiles, ametralladoras y pistolas y se hizo el tránsito a la legalidad.
En todo caso, para la "guerrillerada" puede ser un mensaje difícil de comprender, pues a pesar de que el presidente Santos fue claro en señalar que quienes no hayan vuelto a delinquir luego de la firma del acuerdo pueden estar tranquilos, para los excombatientes rasos queda la incertidumbre tras la captura de Santrich.
Si a esto se suman los incumplimientos en la implementación de los proyectos productivos, la situación no es la mejor para que se dé en forma efectiva ese tránsito a la legalidad.
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Pero el país debe perseverar y debería ser esta una oportunidad para dejar claro que el acuerdo de paz funcionó, que quien vuelva a delinquir debe ir a la justicia ordinaria, también para que la Farc se deslinde definitivamente del narcotráfico y de actividades ilícitas y para que Iván Márquez aclare si uno de sus familiares también está en la misma red de la mafia.
Políticamente para las Farc, esto también significa un duro golpe, pues aplica la figura de la silla vacía y la curul en la Cámara de Representantes dejada por el detenido Santrich no podrá ser ocupada por nadie más.
Para finalizar, más allá de las suspicacias relacionadas con esta captura a cinco días de la llegada a Colombia del presidente Donald Trump, es el momento de pedir a la Fiscalía total claridad para que el país tenga certeza de que efectivamente hay pruebas contundentes que vinculen a Jesús Santrich, el burlesco hombre del “quizás, quizás, quizás” para el perdón de las víctimas, con una conspiración para poner a circular diez toneladas de cocaína en las calles de Estados Unidos.
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