Afiliados de la EPS Famisanar en Bogotá denuncian graves demoras y desorganización en la entrega de medicamentos por parte del operador farmacéutico Ramédicas.
Según los testimonios de los usuarios, el proceso se ha convertido en un verdadero calvario, con largas filas que comienzan desde las dos o tres de la mañana, donde se reparten entre 120 y 150 fichas diarias, a pesar de que más de 400 personas suelen esperar para ser atendidas.
Los pacientes aseguran que, aunque los horarios de atención se extienden hasta las cinco de la tarde, en varios puntos los funcionarios cierran antes de tiempo una vez se agotan las fichas, dejando sin servicio a quienes esperan durante horas.
Además, denuncian que las personas deben hacer fila a la intemperie, sin acceso a baños ni zonas de espera, lo que agrava la situación de quienes padecen enfermedades que les impiden permanecer mucho tiempo de pie.
Las quejas se han difundido a través de redes sociales, donde los usuarios han solicitado mayor control por parte de las autoridades de salud y de la propia EPS.
Ante las denuncias, Famisanar respondió mediante un comunicado en el que lamentó las demoras y explicó que se están implementando acciones para agilizar la entrega de medicamentos. La entidad pidió paciencia a sus afiliados mientras el nuevo operador, Ramédicas, logra estabilizar la operación y mejorar la atención en los puntos de dispensación.