Qué es el Mommy Makeover y por qué dicen que cambia vidas tras la maternidad
Según un estudio, el 62 % de las madres consideran hacerse procedimientos estéticos posparto.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
El Mommy Makeover es un procedimiento de cirugía plástica que combina técnicas como abdominoplastia, cirugía de senos y liposucción para ayudar a mujeres que desean recuperar su figura tras el embarazo. Se ha convertido en una opción cada vez más popular entre madres que experimentan cambios físicos difíciles de revertir con ejercicio o dieta.
Según la International Society of Aesthetic Plastic Surgery (ISAPS), en 2023 se realizaron más de 4,1 millones de cirugías de senos, 2,2 millones de liposucciones y 5,1 millones de procedimientos corporales, dentro de los cuales el Mommy Makeover representa una tendencia creciente. El 90 % de quienes se someten a estas intervenciones son mujeres entre los 25 y 45 años, la mayoría de ellas madres.
El doctor Jorge Andrés Afanador, cirujano plástico, explica que este procedimiento destaca por su personalización: “Las mujeres no buscan solo una transformación física, sino sentirse cómodas en su propio cuerpo nuevamente”.
La abdominoplastia corrige la flacidez abdominal y el daño muscular causado por el embarazo. La cirugía de senos puede implicar aumento, levantamiento o reducción, según el caso. La liposucción, por su parte, se enfoca en zonas como caderas, espalda o muslos para armonizar el contorno corporal.
“Es una intervención con impacto físico y emocional. Recuperar el contorno corporal muchas veces se traduce en recuperar la autoestima”, señala el especialista.
Un estudio de la American Society of Plastic Surgeons muestra que el 62 % de las madres consideran hacerse procedimientos estéticos posparto, y más del 80 % de quienes se someten al Mommy Makeover reportan mejoras en su bienestar emocional.
Publicidad
No obstante, los especialistas recomiendan esperar al menos seis meses después del parto y haber terminado la etapa de lactancia antes de someterse a la intervención. El tiempo de recuperación varía entre tres y seis semanas, dependiendo de los procedimientos combinados.