Como padre de familia, respóndase estas preguntas, que podrían dar indicios de si su hijo sufre o no del Síndrome del Niño Rico.
Analizando el tema, en Generaciones BLU estuvo la experta Sandra Herrera, psicóloga de la Universidad de La Sabana con un doctorado en la Universidad de Salamanca y directora de la Escuela de Padres con talento humano. (Vea también: Navidad, una época en la que los adultos se vuelven niños).
“El Síndrome del Niño Rico va muy ligado al Síndrome del Emperador y tiene que ver con que nosotros como padres démosle a nuestros hijos lo que nosotros no tuvimos y en ese juego de darle lo que no nos dieron, no ponemos límites”, enfatizó Herrera.
“Nosotros no podemos ser solamente padres proveedores y complacientes. Lo que estamos haciendo es dar y dar y ni siquiera te dicen un ‘te amo’”, añadió.
Entre tanto, la experta dijo que muchas veces los padres no saben cuándo es “dar demasiado”.
“Dar demasiado es darle sin que él te pida, es comprar el afecto, es dar cuando no hay necesidad, el problema no está en que el hijo no pueda tener la última tecnología, es cómo lograr tenerla. ¿Quieres tal cosa? Cuánto tienes ahorrado y yo te completo para que lo puedas comprar”, explicó.
Finalmente, analizó otro tema complicado para las familias, que es cómo enseñar disciplina a los menores de edad.
“Pienso que la mejor forma de enseñar disciplina es ser un buen modelo, auto disciplinado y constante en los proyectos. Cuando los niños son volátiles, es porque su papá o mamá son volátiles”, finalizó.