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BLU 10 AM que los estudiantes fueron expuestos a un gran peligro porque el colegio no tomó las medidas de precaución adecuadas.
“Han pasado 11 meses y aún no ocurre nada. Desde el punto de vista legal, apenas se ha imputado al lanchero, esperamos que el nuevo fiscal se tome el trabajo de revisar el caso con un poco más de cuidado (…) nosotros no le entregamos a nuestra hija María Camila a un lanchero, se la entregamos a un colegio que creíamos que amaba a nuestros hijos”, dijo Prieto.
Además, dijo que varios padres de familia víctimas del accidente no se les han hecho el acompañamiento necesario por parte del colegio. “El colegio no nos dio explicaciones de lo que ocurrió en el accidente”.
Por su parte, el rector del colegio, Luis Eduardo Rivas, dijo se solidarizan con el dolor de las familias y que la historia del English School se partió en dos después del accidente. “Hemos hecho todo lo que está en nuestra manos, establecimos un trabajo de acompañamiento con nuestros estudiantes”.
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Le respondió Mónica Prieto Ariza que el colegio tomó las medidas correspondientes en cuanto al trabajo sicológico y ha colaborado con la documentación requerida para el proceso judicial.
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