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El contenido fue subido a Internet por Freddy Fernández, quien narra cómo su hijo, estudiante de 8°, denunció en varias ocasiones ante profesores y autoridades del colegio los abusos que sufría a manos de un compañero de salón, sin que nadie hiciera algo al respecto.
Cansado de la situación, Freddy aconsejó a su hijo que se defendiera del matoneo golpeando al joven que lo molestaba; tres días después el hombre recibió una llamada del plantel educativo para informarle que el pequeño había sido suspendido.
El hombre recibe críticas en redes sociales por el modo en que manejó la situación, mientras otros le apoyan al ser evidente la falta de acción por parte del colegio, que no tomó medidas contra el abusador pero sí contra el niño que se defendió.