El padre Rafael de Brigard reflexiona sobre el mensaje del Evangelio de San Marcos, donde Jesús desafía a un hombre rico a desprenderse de sus posesiones para seguirle. Este pasaje invita a cuestionar las prioridades y a reconocer que la vida eterna no se hereda con riquezas, sino con una relación profunda con Dios.
“Qué difícil es para los ricos entrar en el reino de Dios”, dice Jesús, subrayando el apego excesivo a lo material como una barrera espiritual.
El padre Rafael destaca la pedagogía amorosa de Jesús, quien no busca humillar a los ricos, sino invitarlos a una mayor generosidad. Al recordar los mandamientos, señala que cumplir con ellos no solo acerca a Dios, sino que también mejora las relaciones humanas. “Amar la vida, ser honesto, ser verdadero, ser buen hijo”, resume.
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