En su reflexión dominical, el pastor Andrés Corson compartió un mensaje alentador sobre cómo enfrentar las acusaciones injustas, recordando que incluso Jesús experimentó esta prueba. Citando a Pedro 2:23, explicó: “Jesús no respondía cuando lo insultaban ni amenazaba con vengarse cuando sufría. Dejaba su causa en manos de Dios, quien siempre juzga con justicia”. El pastor también abordó historias bíblicas y contemporáneas de personas acusadas injustamente, como José en Egipto, quien terminó en la cárcel por un crimen que no cometió, pero siempre contó con la presencia de Dios. Corson destacó: “Aunque José estaba en prisión, el Señor estaba con él”.Finalmente, Corson recordó que la persecución contra la iglesia y los creyentes es una realidad que debemos enfrentar con sabiduría y fe. Citando Mateo 10:16, animó a los fieles a ser “astutos como serpientes e inofensivos como palomas” y a vivir con transparencia para evitar caer en la tentación de ocultar errores.Escuche la reflexión completa aquí:
En su reflexión dominical, el padre Rafael de Brigard destacó la importancia de la solemnidad de la Inmaculada Concepción en el camino de Adviento, invitando a los fieles a contemplar a María como el ejemplo más sublime de fe y entrega a Dios. Citando el Salmo 97, recordó que María es el reflejo de las maravillas divinas: “Cantad al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas”. A través de su inmaculada pureza, Dios la eligió como templo para su hijo, Jesús, demostrando el poder de la gracia para vencer el pecado.El Evangelio de Lucas (1:26-38) fue el núcleo de la reflexión, donde se destaca la humildad y fe de María al aceptar el plan divino: “Hágase en mí según tu palabra”. El padre Rafael subrayó cómo las palabras del ángel a María, “Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo”, invitan a los creyentes a vivir con alegría y confianza en Dios, incluso en medio de pruebas. "Cuando sentimos la presencia de Dios, el temor desaparece y el corazón se llena de esperanza y fortaleza", explicó.Escuche la reflexión completa aquí:
El pastor César Castellanos compartió en su reflexión dominical el profundo significado de la salvación y el nuevo nacimiento en Cristo. Según explicó, la salvación no es un simple acto religioso, sino un evento trascendental en el que el ser humano, perdido en el pecado, encuentra redención a través de Jesús. Citando a Hebreos 2:3, Castellanos enfatizó: “¿Cómo escaparemos nosotros si descuidamos una salvación tan grande?”, y recordó que esta es una invitación a valorar la obra perfecta de Cristo, quien con su muerte y resurrección aseguró la victoria sobre el pecado y la condenación.El pastor destacó la importancia de entender que el nuevo nacimiento implica una transformación completa de vida. "El nuevo nacimiento no es repetir ciclos de pecado y arrepentimiento; es vivir bajo el carácter de Cristo", afirmó. Recordó la enseñanza de Jesús a Nicodemo en Juan 3: “El que no naciere de nuevo no puede ver el reino de Dios”.Escuche la reflexión completa aquí:
Un amigo, abatido y desanimado, me confiesa su decepción hacia alguien en quien había depositado las mejores expectativas. Me habla de dolor, traición y frustración, culpando a esa persona por sus sentimientos. Con respeto y empatía, le planteo una pregunta retórica: ¿Hasta qué punto eres responsable de las acciones de esa persona? Mi respuesta es clara: muy poco. No podemos controlar cómo se comportan los demás ni obligarlos a cumplir nuestras expectativas, pero sí tenemos control sobre estas últimas, y ahí radica nuestra responsabilidad.1. Nuestras expectativas: A veces esperamos demasiado de los demás, lo que nos hace vulnerables a la decepción. Es importante ser realistas y recordar que las personas son imperfectas y pueden equivocarse.2. Nuestros límites: Establecer límites claros y saludables protege nuestra confianza y evita que otros abusen de ella.3. Nuestra reacción: Ante la decepción, podemos elegir entre quedarnos atrapados en el dolor o transformar la experiencia en aprendizaje y fortaleza.Por eso, creo que es esencial ser analíticos y objetivos al depositar nuestra confianza en alguien. Las palabras o emociones de esa persona pueden haberte cegado ante una realidad evidente: sus capacidades no estaban alineadas con tus expectativas. En lugar de castigarte, reflexiona con sensatez para evitar caer en el mismo error.No se trata de exonerar a quien falló, sino de extraer una lección que permita construir relaciones más reales y sólidas. Esta enseñanza es válida en todos los ámbitos de la vida, desde lo íntimo hasta lo público. No dejes que el entusiasmo te lleve a confiar ciegamente, ni apuestes por alguien que ya ha demostrado no estar a la altura de un proyecto serio.Cuidar tus expectativas es, en esencia, una forma de protegerte y avanzar hacia una vida más coherente. Aprende a confiar con sabiduría y discernimiento, porque en ello está la clave para construir relaciones auténticas y proyectos significativos.
El pastor Andrés Corson invita a reflexionar sobre la historia del rey Ezequías, quien a través de su fe, oración y fidelidad, experimentó el favor de Dios en momentos críticos de su vida. Basándose en el libro de Isaías, Corson destaca cómo Ezequías, ante la noticia de su inminente muerte, oró con fervor y lágrimas, recordando al Señor su fidelidad. “Acuérdate, Señor, que siempre te he sido fiel y te he servido haciendo lo que te agrada” (Isaías 38:3). Esta oración no solo le otorgó quince años más de vida, sino que también reveló la importancia de una relación genuina con Dios, construida en fidelidad y comunión constante.Corson enfatiza que la fidelidad de Ezequías se reflejó en su rechazo a la idolatría y en la restauración de la adoración en Judá. “Ezequías hizo lo que era agradable a los ojos del Señor” (2 Reyes 18:3), eliminando prácticas paganas y estableciendo nuevamente el culto a Dios en el templo. Escuche la reflexión completa aquí:
El padre Rafael de Brigard reflexionó este domingo sobre el inicio del Adviento, un tiempo litúrgico que invita a preparar el corazón para la celebración de la Navidad y el encuentro con Dios. Basándose en el Salmo 24 y el Evangelio de Lucas, destacó que este período llama a levantar la mirada hacia el Señor y reconocer su constante compañía en la vida: "Cuando empiece a suceder esto, levántense, alcen la cabeza; se acerca su liberación" (Lucas 21:28).En su mensaje, subrayó que nuestra sociedad moderna, marcada por la ansiedad y la incertidumbre, tiende a alejarse de Dios, generando un vacío espiritual. Sin embargo, estas dificultades pueden ser una oportunidad para volvernos hacia Él. “Nuestra época está llena de pruebas, pero también de posibilidades para descubrir que el Señor es nuestra luz y salvación; ¿a quién temeremos?”, reflexionó.Escuche la reflexión completa aquí:
El pastor César Castellanos invita a reflexionar sobre el significado del Reino de Dios y su cercanía a la vida. En su mensaje, destaca cómo el Señor enseñó a sus discípulos a orar diciendo: "Venga tu reino, hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra" (Mateo 6:10). El pastor también señala que el acceso al Reino requiere dos pasos esenciales: arrepentimiento y fe en el evangelio, tal como lo proclamó Jesús en su primer mensaje: "El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos y creed en el evangelio" (Marcos 1:15). Sin embargo, Castellanos advierte sobre la diferencia entre remordimiento y arrepentimiento genuino, ilustrando este contraste con el ejemplo del rey David en el Salmo 51, quien se humilló sinceramente ante Dios tras ser confrontado por su pecado. "El arrepentimiento es un cambio de actitud, un giro total hacia Dios", destacó, recordando que este proceso permite un encuentro transformador con el Padre.Escuche la reflexión completa aquí:
Escucho el relato de una hija que sufre profundamente por el estado mental de su madre, quien ha perdido la memoria. La madre vive atrapada en recuerdos distantes de personas y situaciones del pasado, sin reconocer a su propia hija, a quien incluso pregunta por el paradero de “su única amada hija”. Las lágrimas que corren por las mejillas de esa hija me conmueven y me llevan a reflexionar sobre la importancia de cuidar nuestra memoria. Todos estamos expuestos a perderla por distintas razones, y ese vacío nos aleja de quienes están a nuestro lado.Cuidarnos es una tarea esencial de la vida, y este cuidado debe ser integral, abarcando todas las dimensiones de nuestra existencia. Buscando información sobre cómo proteger la memoria, me topé con el método del “Palacio de la Memoria”, una técnica que ha ganado popularidad gracias a Bill Gates, quien la ha aplicado y compartido su experiencia.El “Palacio de la Memoria”, también conocido como método de loci, es una técnica mnemotécnica para mejorar la memoria. Consiste en crear un espacio imaginario, como una casa, un palacio o incluso un recorrido por una ciudad, donde asociamos información con objetos o escenas específicas. Este es el proceso para implementarlo:1. Crea tu palacio: escoge un lugar que conozcas bien o que puedas visualizar fácilmente, como tu casa, escuela o un parque.2. Divide el espacio: separa el lugar en secciones o habitaciones, asignando una categoría de información a cada área.3. Asocia información con imágenes: crea imágenes vívidas y fuera de lo común para cada elemento que quieras recordar; cuanto más inusual, mejor.4. Ubica las imágenes: coloca cada imagen en un lugar específico de tu palacio, asegurándote de que la ubicación sea lógica y fácil de recordar.5. Recorre tu palacio: repasa mentalmente tu palacio varias veces, revisando las imágenes hasta que recuerdes toda la información.Este método permite organizar grandes cantidades de información de manera efectiva, estimula la imaginación y crea asociaciones que hacen del aprendizaje un proceso divertido. Mantener nuestra memoria activa es crucial en la lucha contra el olvido.
En su reflexión dominical, el pastor Andrés Corson recuerda que todos atraviesan desiertos, esas etapas difíciles entre un sueño dado por Dios y su cumplimiento. “El desierto es el espacio entre la esclavitud y la tierra prometida, entre la pobreza y la prosperidad, entre la enfermedad y la sanidad”, explicó. A través de ejemplos bíblicos como José, David e Israel, el pastor mostró como Dios utiliza estas pruebas para formar carácter, probar la fe y preparar para el propósito que tiene reservado. Como lo dice Santiago 1:2-3, “Consideren como un privilegio enfrentarse a pruebas, porque producen resistencia”.Corson destacó que uno de los mayores propósitos del desierto es acercarse a Dios. "En el desierto, Dios nos habla. La palabra hebrea para desierto, midbar, también significa hablar", mencionó, citando Deuteronomio 8:3: “No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”.Finalmente, Corson recordó que Jesús mismo vivió un desierto y dio ejemplo de cómo enfrentarlo: con alegría, oración y la palabra de Dios. “Fijemos la mirada en Jesús, quien soportó la cruz por el gozo que le esperaba”, citó de Hebreos 12:2.Escuche la reflexión completa aquí:
Este domingo, 24 de noviembre, el pastor César Castellanos invita a reflexionar sobre uno de los conceptos más profundos de la fe cristiana: la gracia, entendida como el favor inmerecido de Dios. "La gracia no es fruto de nuestras buenas obras o esfuerzos", destacó el pastor, subrayando que es un regalo otorgado por la misericordia divina. Como lo expresa el apóstol Pablo en Hebreos 4:16: "Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro", recordándo que es en ese trono donde Dios administra no solo justicia, sino también compasión.Además, señaló que el apóstol Juan recuerda la ley vino por medio de Moisés, pero la gracia y la verdad vinieron a través de Jesucristo (Juan 1:17). En esta luz, entendemos que la gracia no es fruto de nuestros esfuerzos, sino un regalo que se recibe por la fe. Este principio se extiende a lo largo de las Escrituras, mostrándonos ejemplos desde la creación del hombre, quien fue hecho a imagen de Dios, hasta personajes clave como Noé y Ana, quienes encontraron gracia ante los ojos de Dios.Escuche la reflexión completa aquí: