Los gobiernos del mundo, principalmente de las primeras economías, invierten grandes porciones de su presupuesto en defensa y prevención del crimen. Es justamente lo que hace Estados Unidos, que está usando la analítica de ‘big data’ y la predictiva de datos para anticipar qué personas podrían suponer una amenaza en el futuro, incluso antes que ellos siquiera se planteen serlo.
En la actualidad, la agencia de seguridad nacional de los Estados Unidos tiene una lista llamada ‘No fly list’, con la que sus agentes intervienen a cualquier pasajero de avión en el mundo con destino a su país para evitar que suba o inicie el viaje.
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Para mejorar los resultados, se hace uso de esta nueva tecnología de datos para diseñar perfiles de personas de acuerdo a sus preferencias, estudios, conductas documentadas, comportamientos financieros, entre otra infinidad de variables, para calcular si algún día podría cambiar sus posturas de positivas a negativas a cualquier símbolo, activo, personaje o tradición de Estados Unidos.
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Desde ya se levanta la polémica por la posible adición de cientos de miles de personas a los 47 mil de la ‘No fly list’, y la posibilidad de no defenderse en debido proceso en caso de ser “favorecido” por estos estudios.