El pueblo colonial en Santander que eligen visitar extranjeros por su tranquilidad
Este reconocido municipio santandereanos ha sido galardonado en diversas premiaciones, además cuenta con una rica gastronomía y con más de 70 planes posibles.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Cifras de ProColombia han demostrado que el turismo en el país ha aumentado en los últimos años y tomando mayor protagonismo de nuevas regiones por conocer; de hecho, según la entidad, en 2024, el país cerró el año con US$10.082 millones en ingresos por viajes y transporte aéreo de pasajeros, lo que representa un crecimiento del 12,8% frente a 2023.
Esto ha sido posible gracias a esa ‘joyas’ que laten en diferentes territorios y hay un departamento que ha tomado mayor protagonismo por los turistas que buscan y, por ejemplo, la reconocida Semana de Receso ha demostrado un crecimiento en su búsqueda hasta del 65 % en comparación con otros destinos: Santander, según cifras oficiales Booking.com, la reconocida plataforma de viajes.
Pero es que, además, el departamento ha demostrado no solo tener ‘joyas ocultas’, sino que su turismo se ha transformado en un proceso de sostenibilidad el cual ha permitido que, sobre todo, el público extranjero elija sus destinos por encima de todo y existe un pueblo prueba de ello, que, según cifras de la mencionada marcada, se volvió en uno de los favoritos por la tranquilidad que ofrece sus calles construidas por la población local: Barichara.
Desde el aeropuerto Internacional El Dorado, es decir, en Bogotá, se encuentra a casi 8 horas de viaje por tierra y en avión a 4 horas, pues, pese la cercanía del pueblo con Bucaramanga -la ciudad capital de Santander- el trayecto por la vía que conecta al Parque Nacional de Chicamocha suele tener un recorrido extenso, pero lleno de paisajes paradisíacos.
Su importancia no ha sido una novedad, no por nada se la conocido por mucho tiempo como el ‘Pueblo más lindo de Colombia’, sino que, además, su población local comenzó a trabajar en un turismo sostenible en donde el extranjero, que ha sido el más enamorado del destino, ha encontrado paz, tranquilidad y, además, contar con paisajes, arquitectura y vistas que pocos sitios en el país ofrecen. Con mayor tendencia de españoles, chilenos y franceses.
“Esta es una de las grandes joyas del departamento de Santander. Ha enamorado a sus visitantes con su encanto histórico, calles empedradas y paisajes impresionantes. Su plaza principal es el corazón del pueblo y es perfecta para conocer y familiarizarse con su cotidianidad. Algunas actividades populares son caminar por el antiguo Camino Real a Guane, ir a la Iglesia de Santa Bárbara, aprender sobre la elaboración artesanal del papel y disfrutar de la gastronomía local”, indicaron desde Booking.
Publicidad
Si bien las calles coloniales de este municipio santandereano han enamorado a miles de personas durante décadas, en sus calles lo más valioso han sido sus propios habitantes que, desde hace tiempo, han apostado por un turismo responsable y sostenible en donde el visitante no solo disfrute de las actividades, sino que quede con una reflexión del cuidado del entorno pensando en futuras generaciones.
Ejemplo de ellos ha sido Juntanza Barichara, un proyecto local en donde las mujeres son protagonistas al lado de las personas locales apoyando al campesino y al turista a sacarle mayor provecho a toda la zona, más allá de los simples destinos turísticos.
Natalie, una de las líderes de este movimiento ciudadano, es el rostro de una transformación que nace desde el orgullo por el territorio. Nacida en Barichara, ha trabajado durante años en el sector turístico y actualmente representa a la administración municipal en temas de equidad de género. Gracias a su compromiso, el municipio adoptó por primera vez en su historia una política pública de la mujer, construida junto a 500 mujeres del territorio.
Publicidad
“Queremos promover el turismo, pero con una mirada diferente: donde cada mujer cuide su casa y su territorio”, señala. La fundación logró recuperar una casa campesina, ahora convertida en un espacio de atención jurídica y psicológica para mujeres, y sueñan con que se convierta en un mapa vivo de unidades productivas femeninas que aporten a la economía local.
Un viaje en avión, de ida y vuelta, hasta Bucaramanga se encuentra sobre los 450 o 500 mil pesos, según Booking, además el trayecto desde la capital santandereana hasta el pueblo tiene un valor promedio de 70.000 pesos. Una noche en un hotel va desde los $120.000 hasta los $420.000 y actividades, gastronomía y demás pueden rondar unos 250.000 para al menos 4 días, o más si se buscan planes de mayor profundidad.