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Lo importante es que cace ratones: columna de Óscar Montes

296895_Blu Radio/ Panelista de BLU Radio Barranquilla, Óscar Montes. Foto: Cortesía
Blu Radio/ Panelista de BLU Radio Barranquilla, Óscar Montes. Foto: Cortesía

Una frase célebre atribuida al líder reformista chino Deng Xiaoping, según la cual “no importa si el gato es blanco o negro, siempre y cuando cace ratones”, podría aplicarse en el caso del nuevo contralor general de la República, Carlos Felipe Córdoba.

En efecto, superado el capítulo de su elección, en lo que tiene que ver con su respaldo político, es importante y urgente que el nuevo Contralor General se concentre de inmediato en la lucha contra la corrupción, flagelo que según su antecesor, Edgardo Maya Villazón, le cuesta al país 50 billones de pesos anuales.

Una vez elegido por el Congreso de la República, Córdoba, como buen gato, debe dedicarse las 24 horas del día y los 7 días de la semana a cazar ratones. Que los hay por montones: en Colombia hay “carteles” de todo tipo en todos los departamentos del país, desde los de la hemofilia hasta los de la educación y los alimentos.

En todos ellos ha habido derroche de recursos, robos continuados y pagos de coimas y sobornos por miles de millones de pesos. Hay ratones en Reficar, en los Programas de Alimentación Escolar, en las construcciones de las sedes del Sena, en las construcciones de autopistas de cuatro carriles y también en también en las vías veredales.

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Hay ratones en todos los rincones del país donde haya un contrato. La obligación del contralor Córdoba es cazarlos, como también es el deber del fiscal general, Néstor Humberto Martínez; así como del procurador general, Fernando Carrillo.

Lea también: La consulta anticorrupción: columna de Óscar Montes

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Ellos tres están al frente de sus entidades para cazar ratones, sin importarles su color o su tamaño. Como tampoco nos debería importar a los colombianos el color de los gatos, si son blancos o negros.

Lo que sí nos debería importar y mucho es que cumplan con su obligación de cazar ratones. Si los gatos son blancos o negros, eso es lo de menos.

 

 

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