José Estrada, propietario del local de Supergiros en el barrio El Manantial en Soledad al que le lanzaron una granada, cuenta que el local quedó totalmente destruido tras ser detonada la granada de fragmentación de manera controlada por miembros del Esmad.
Estrada manifestó que por cinco años estaba arrendado el inmueble a la empresa de chance y que ahora los vecinos tienen temor pues dicen no querer que se haga esta actividad en el vecindario tras el atentado.
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Finalmente, Estrada manifestó que testigos le informaron que los presuntos autores del hecho iban en una motocicleta y otro, vestido de blanco, había salido corriendo después de haber arrojado el artefacto. A su vez, recordó que ya habían escuchado rumores de amenazas de las Bacrim por el cobro de vacunas a la empresa Supergiros.
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