Dos mineros murieron en medio de accidentes en los socavones ilegales en el municipio de Anzá, Antioquia. La comunidad está alarmada por el descontrolado aumento de minería ilegal en zonas de reserva forestal.
En esa localidad del Occidente antioqueño ya hay preocupación de las autoridades por la expansión de la minería ilegal desde otros municipios cercanos hacia su territorio, en especial en zonas de reserva forestal.
Según el personero de Anzá, Juan Guillermo Valle, esta explotación ilícita en el corregimiento Güintar ya dejó en las últimas horas dos mineros fallecidos, como el caso de Óscar Arley Aguirre a quien se golpeó con una polea contra una roca en un socavón de oro y Richard Antonio Bolívar que fue víctima al parecer de la inhalación de un pico, que es un gas tóxico dentro de una mina de carbón.
Este es el reflejo de la preocupación que tienen las comunidades y el personero municipal pues hay una falta de control contra esta minería ilegal que ha ingresado a Anzá con alto riesgo en la seguridad.
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"Es de señalar que la Gobernación de Antioquia, secretaría de Gobierno, Seguridad, Minas y Corantioquia son conocedores de tiempo atrás de la grave situación de orden público que padece el municipio de Anzá por la presencia de grupos armados al margen de la ley que fungen como autoridad especialmente en la zona rural del municipio", señaló.
Al igual que en otros municipios, los mineros informales en Anzá también estarían siendo víctimas de las extorsiones por parte del Clan del Golfo y estarían explotando de manera ilegal territorios que harían parte de los títulos mineros de la empresa Exploraciones Northern Colombia.
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