La inclemencia de las lluvias continúa golpeando con gran fuerza al departamento del Atlántico, tras un torrencial aguacero que se extendió por más de cuatro horas, que dejó bajo el agua a los barrios Rebolo, La Luz, La Chinita, Villanueva, Don Bosco Etapa I y el corregimiento Juan Mina, entre otros, en Barranquilla.
El temido arroyo Hospital volvió a desbordarse en medio del agua que cayó en el departamento, lo que llevó a activar planes de emergencia para atender a las familias afectadas.
Saray Barrios, líder comunitaria en el barrio Rebolo, precisó que aunque hicieron lo humanamente posible para salvar sus pertenencias, la presión del agua fue inminente para llevarlos a perder casi todos sus enseres.
"Nosotros corrimos a salvar lo poquito que nos queda porque, cada que llueve, es mucho peor que la vez a anterior. La presión generaba que el agua saliera por las rejillas, los desagües, los inodoros, lo que imposibilitaba que pudiéramos salvar algunas cosas", dijo.
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El tradicional Rincón Latino, escenario político de Bernardo 'El Cura' Hoyos, también fue el escenario de graves inundaciones, situación que obligó a que el ex alcalde de Barranquilla —con el agua hasta la cintura— enviara un fuerte mensaje al alcalde Jaime Pumarejo por las obras de canalización de los arroyos.
"¿Qué está haciendo, alcalde? ¿Dónde están los millones invertidos? ¡Por Dios! En vez de estar pensando en la Fórmula 1, piensen en la gente pobre", alegó Cura mientras se encontraba realizando un video mostrando la situación que se registró en el lugar.
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Por otro lado, el desbordamiento de las aguas en el Caño de La Ahuyama también golpeó con gran ímpetu a decenas de comerciantes en el Mercado de Granos de Barranquillita, a quienes les tocó cerrar sus negocios —antes de lo previsto— por las aguas estancadas.
"En los 30 años que llevo trabajando en el Mercado de Granos jamás había visto cosa semejante, pues las aguas inundaron absolutamente todo, no quedó nada seco, y eso nos obligó a cerrar todo porque no teníamos cómo trabajar", señaló Armando Beleño, comerciante del sector.
En el corregimiento Bajo Ostión, en Tubará (Atlántico), las calles se convirtieron en ríos, pues la fuerza del agua se llevó todo a su paso; tal como lo relató —entre llanto— una de las habitantes afectadas por el agua a través de videos, mientras que en el municipio de Puerto Colombia, el desbordamiento del arroyo León generó graves emergencias en algunos sectores aledaños al caudal.
Las autoridades establecerán, este viernes, la cuantía de damnificados en Barranquilla y el Atlántico para iniciar la entrega de ayudas humanitarias y material de reparación de las viviendas, con atención a los damnificados por la lluvia.
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Grupos de jóvenes se enfrentaron a "palos, piedras y machetes" mientras llovía en Barranquilla.
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Las lluvias también se convirtieron en escenarios de fuertes enfrentamientos entre pandillas, quienes a “piedras, palos y machetes” protagonizaron batallas campales en múltiples sectores. Tal fue el caso que se registró en el barrio La Sierrita, sur de Barranquilla, en el que sus habitantes relataron —a través de videos— como hasta con cuchillos, pretendían agredirse los unos a los otros mientras caía la lluvia.
La situación no fue ajena en el sector de la Murillo con carrera 2, pues mientras la Policía Metropolitana de Barranquilla llegó a intervenir el enfrentamiento de unos 70 jóvenes en el barrio Ciudadela 20 de Julio, algunos aprovecharon para tomar la motocicleta de los uniformados y darse una “paseadita” por el carril del Transmetro.
El coronel Jorge Urquijo, comandante de la Policía Metropolitana, envió un fuerte mensaje a los padres de familia para evitar que sus hijos cometan actos contrarios a la normal, mientras adelantan las investigaciones para establecer las identidades de los jóvenes implicados.
"No vamos a permitir que acciones contrarias a las normas, a la convivencia, perturben la tranquilidad de los ciudadanos en Barranquilla. Estamos adelantando investigaciones, revisando cámaras de seguridad, pero hacemos un enérgico llamado a padres de familia para que vigilen más a sus hijos", precisó.
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Finalmente dos personas fueron rescatadas de dos arroyos en el sur de Barranquilla; un joven a la altura del barrio Universal, quien logró salvarse "de milagro" de las garras del arroyo Don Juan tras darse un 'chapuzón' hacia un canal de drenaje, y un vendedor ambulante en el sector de Montecristo, quien intentaba recuperar su carro de tintos.
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