Como resultado de la revisión por parte de la Contraloría al proceso licitatorio para la adjudicación de la construcción del acueducto de Santa Marta, cuyo costo es superior a 1.68 billones de pesos, el Contralor (E), Carlos Mario Zuluaga, advirtió sobre los riesgos de incumplimiento que puedan presentarse durante la ejecución de este proyecto estratégico para la capital del Magdalena.
“La advertencia se concreta en un tema muy específico, que es la estructuración del proyecto. Este tiene como propósito y objetivo asegurar que el contratista seleccionado tenga la capacidad y el músculo financiero para desarrollar la obra”.
Señaló que, después de analizar la información relacionada con la licitación, se identificaron debilidades en la planificación y en la capacidad financiera.
“Cuando uno revisa los términos establecidos en esta contratación, la capacidad de endeudamiento solicitada es mucho menor de lo que debería ser. No es consecuente ni coherente para que el contratista demuestre que tiene la capacidad y el músculo financiero necesario para llevar a cabo la obra”, resaltó el Contralor.
Añadió que el riesgo es que los recursos comprometidos por parte de la Gobernación del Magdalena puedan generar dificultades durante la ejecución de la obra, y que, de ser adjudicada según lo establecido en la licitación, la falta de liquidez por parte del contratista podría ser un problema.
“Este es un proyecto que tiene un pronóstico bastante complejo. Si llega a adjudicarse de esta manera, es probable que la obra esté desfinanciada y que, de no haber capacidad para oxigenarla financieramente, pueda terminar como un elefante blanco o en una obra inconclusa.
Por último, reiteró que de suscribirse el contrato como está establecido hoy, se podría incurrir en una posible violación a la ley sobre vigencias futuras.
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