Integrantes de la coordinadora guerrillera del pacífico de la segunda Marquetalia y guerrilleros del frente de guerra Urías Rondón del comando coordinador de occidente, de alias 'Iván Mordisco', se habrían reunido en un indeterminado lugar del pacífico nariñense con el fin de explorar un cese bilateral al fuego entre estos dos grupos que sería pactado antes del 10 de enero, fecha en la cual darán a conocer los protocolos de los cuales el Gobierno nacional ya está enterado en el marco del anuncio que hizo el presidente Gustavo Petro, para lograr la paz total.
Blu radio conoció, en exclusiva, que a la reunión asistieron dos delegados del frente de guerra de las Farc Urías Rondón, y voceros de los frentes Alfonso Cano, Iván Ríos, Oliver Sinisterra y Ariel Aldana, que son parte de la coordinadora guerrillera del pacífico Segunda Marquetalia.
El anuncio de esa reunión entre estructuras de las disidencias de las Farc fue hecho por Felipe Tascón, director del programa de sustitución de cultivos ilícitos, durante una reunión que se cumplió en Tumaco, a la que asistieron delegados de todos los consejos comunitarios del pacífico nariñense.
Según trascendió, las partes solicitaron una semana de plazo para comunicar su intención tanto al estado mayor conjunto de las estructuras de las Farc de 'Iván Márquez', como al comando coordinador de occidente y el estado mayor central de las Farc, bajo el mando de 'Iván Mordisco'.
Esta intención de desescalar la guerra, por lo menos en el pacífico nariñense, también tiene como objetivo escuchar a las comunidades y organizaciones defensoras de derechos humanos y que sean ellos también los garantes de este cese al fuego para disminuir el riesgo de las comunidades por culpa de los fuertes combates entre disidentes de las Farc.
En esta misma reunión, las partes habría acordado fijar, de común acuerdo, los mecanismos de verificación para impedir que factores externos pongan en riesgo el cese de hostilidades que estaría por pactarse entre las dos estructuras de las disidencias de las Farc, que mantienen una disputa territorial en una vasta zona del pacífico nariñense en donde se han originado desplazamiento de cientos de familias mientras que otras más permanecen en confinamiento.
Este cese al fuego, que se estaría planeando entre las disidencias de las Farc, obedece también al llamado que insistentemente ha hecho el presidente, Gustavo Petro, y el alto comisionado para la Paz, Danilo Rueda, para lograr la paz total por lo menos en Nariño, uno de los departamentos más golpeados por la violencia desde que se firmó el proceso de paz con las extintas Farc.
Un vocero comunitario, que estuvo presente en la reunión y que pidió el anonimato, le contó a Blu Radio que desde hace semanas se había planeado el encuentro entre los voceros de esas dos organizaciones armadas ilegales, pero que por motivos de fuerza mayor se había aplazado. Agregó, sin embargo, que gracias al mismo clamor de la comunidad, es muy probable que antes de terminar el mes se pacte un cese de hostilidades para evitar más muertes, desplazamientos y confinamientos en las zonas donde hay presencia militar de las disidencias de las Farc.
"Fue un encuentro muy productivo, aunque al comienzo hubo mucha tensión por parte de los voceros de cada uno de los voceros de las dos agrupaciones", precisó el portavoz comunitario.
Aseguró que una vez terminó la reunión, fueron entregados los detalles al Gobierno nacional en cabeza del alto comisionado para la paz y solo se espera que, antes del 10 de enero, las dos partes entreguen los protocolos que deberán ser aprobados o perfeccionados por el ejecutivo.
Semanas atrás, el comandante de la coordinadora guerrillera del pacífico, Andrés Allende, en entrevista exclusiva con Blu Radio, manifestó su intención de diálogo con los frentes Urías Rondón del comando de occidente y el frente 30 para frenar la guerra que se desató entre ellos desde el noviembre y que ha dejado un sinnúmero de muertos.
A esto se suma que, en menos de dos meses, la coordinadora guerrillera del pacífico hizo entrega a comisiones humanitarias de la Defensoría del Pueblo y Cruz Roja Internacional de, por lo menos, 42 personas que mantuvo como prisioneros de guerra tras combates registrados en el Alto Mira y frontera y en la parte baja del río Mira, en zona rural de Tumaco, pacífico nariñense.
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