Este sábado, 4 de febrero, desde Cali, el superintendente de Salud, Ulahy Beltrán, indicó que el año pasado se recibieron más de un millón de denuncias de inconformidad de las cuales el 35 % eran “suplicas de vida”.
Según el superintendente, estos llamados de inconformidad de usuarios de salud era de personas expuestas a circunstancias que ponían en peligro su vida.
Beltrán aseguró que el organismo debe funcionar como vigilancia, pues su labor debe ser corroborar y hacer pagar a los infractores de salud, sus faltas
“Necesitamos una Supersalud que genera respuestas rápidas y efectivas, que vaya en la misma vía de lo que se propone en la reforma”, puntualizó Beltrán.
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Además, esto es importante para que la ciudadanía crea efectivamente, según él, la entidad es una amiga y tiene la capacidad de resolver las inquietudes que los usuarios tienen.
Los aportes que médicos, personal de salud y comunidad en general hicieron durante la jornada de la primera cumbre por la reforma a la salud, serán revisados para retroalimentar el proyecto que será entregado al Congreso las próximas semanas.
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