Se sea supersticioso o no, el viernes 1 es una fecha que ha dado siempre de qué hablar y generado temor a lo largo de la historia, además de estar profundamente arraigado en diversas culturas, especialmente en el mundo occidental.
Aunque algunos lo toman a la ligera, para otros representa un día lleno de presagios y posibles infortunios y, por eso mismo, para los más creyentes hay una serie de actividades que es mejor no hacer en un viernes 13.
De dónde viene el viernes 13
Este día tiene raíces en diversas culturas. Desde la mitología nórdica, donde la llegada del decimotercer invitado, Loki, causó la muerte del dios de la alegría, hasta el cristianismo, donde el viernes ha sido visto como un día de tragedia, incluido el día de la crucifixión de Jesús.
En la tradición cristiana, el número 13 también está asociado con eventos trágicos. Según la Biblia, durante la Última Cena, celebrada el jueves antes de la crucifixión de Jesús, había 13 comensales. El decimotercero, Judas Iscariote, fue quien traicionó a Jesús, lo que llevó a su crucifixión al día siguiente, un viernes.
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Este día también ha estado marcado por hechos históricos como la persecución de los Caballeros Templarios en 1307, lo que reforzó aún más su mala reputación, y otros eventos como:
- Viernes 13 de diciembre de 1939: 'Viernes negro', uno de los incendios forestales más devastadores de la historia de Australia.
- Viernes 13 de octubre de 1972: el vuelo 571 de Uruguay se estrella en la cordillera de los Andes, conocido como el Milagro de los Andes.
- Viernes 13 de enero de 2012: accidente del crucero Costa Concordia; murieron 32 personas.
- Viernes 13 de noviembre 2015: atentado terrorista en París.
Qué no hacer un viernes 13
Para quienes creen en las supersticiones, este día se convierte en una jornada donde es mejor ser precavido y hay una serie de actividades para ellos que es preferible evitar en esta fecha:
- Romper un espejo.
- Derramar sal.
- Pasar por debajo de una escalera.
- Levantarse con el pie izquierdo.
- Reunirse en un grupo de 13 personas.
- Dejar un mantel blanco sobre la mesa durante la noche.
- Abrir un paraguas en interiores.
- Colocar zapatos nuevos sobre la mesa.
- Cruzarse con un gato negro.
- Cortar ambos extremos de una barra de pan.
- Tener la billetera vacía.
- Viajar o tomar un vuelo con el número 13.
El miedo al número 13, conocido como triscaidecafobia, ha influido en múltiples aspectos de la vida cotidiana, desde la construcción de edificios sin un piso 13 hasta la omisión de ese número en filas de aviones.
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Sin embargo, cuando este número se combina con un viernes, la preocupación se intensifica. Este temor, conocido como parascevedecatriafobia, tiene orígenes que datan de hace siglos, y aunque muchas de las creencias se basan en tradiciones antiguas, su impacto sigue siendo fuerte en la actualidad.