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Tras casi siete horas de discusión, y en un hecho inédito en la historia del Congreso, las comisiones económicas no lograron llegar a un consenso sobre la aprobación del monto del Presupuesto General de la Nación (PGN) para el año 2025.
Las fuertes críticas de la mayoría de los congresistas de las comisiones terceras y cuartas del Senado y la Cámara de Representantes, debido al evidente desfinanciamiento que presenta el presupuesto para el próximo año y la incertidumbre que genera la ley de financiamiento radicada en las últimas horas, la cual busca recaudar 12 billones de pesos, terminaron pasando factura al Gobierno.
La propuesta de un monto de 523 billones de pesos fue negada en dos ocasiones. La votación tuvo que repetirse porque en la primera proposición que respaldaba la propuesta del Gobierno, no se incluyó la cifra exacta consignada en el proyecto de ley.
"Hubo que negar dos veces el monto del presupuesto. Yo esperaría que el Gobierno reflexione. Todavía se pueden reabrir las proposiciones, pero es un hecho que la del Gobierno no tiene opción de discusión", señaló el presidente del Congreso, Efraín Cepeda.
En una sesión marcada por la controversia, por los llamados al orden y las peleas, las comisiones económicas también rechazaron las diferentes propuestas de reducción del monto, que iban desde los 499 billones hasta los 511 billones de pesos.
“Estamos en el limbo y tenemos dos plazos: el domingo 15 de septiembre para ponernos de acuerdo en un monto. Para que haya una decisión, se necesita que las cuatro comisiones estén de acuerdo. No está escrito en la ley, ni hay antecedentes, porque nunca ha sucedido. Camino uno: intentarlo de nuevo y de aquí al domingo llegar a un acuerdo sobre el monto.
Camino dos: esperar hasta la ponencia que debe votarse máximo el 25 de septiembre y ahí lograr un consenso. El Gobierno debe tener una sola postura y es su responsabilidad llegar a acuerdos", sostuvo la presidenta de la Comisión Cuarta del Senado, Angélica Lozano.
Sin embargo, el Gobierno nacional insiste en que el monto de 523 billones de pesos es el resultado de un estudio minucioso de casi seis meses, y que el camino de la ley de financiamiento por 12 billones fue el fruto de casi dos meses de trabajo. Por ello, no van a desistir de su propuesta, ya que modificarla podría afectar diversas inversiones sociales en áreas como salud, educación y la lucha contra la pobreza.
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“No existe una decisión unánime, y al no haberla, la interpretación jurídica es que sigue vigente la propuesta del Gobierno. Esto no es un juego; el monto se preparó en seis meses y la ley de financiamiento con dos meses de anticipación”, aclaró el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla.
Ante la incertidumbre, tanto los integrantes de las comisiones económicas como el Gobierno realizarán varias consultas legales y jurídicas. Volverán a reunirse este jueves a partir de las nueve de la mañana para definir el camino a seguir, que podría incluso llevar a que el presupuesto sea expedido por decreto si no se logra aprobar antes del 20 de octubre.
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