La Procuraduríamanifestó que la investigación disciplinaria se abre “con la finalidad de verificar si su responsabilidad pudo estar comprometida en los hechos acaecidos el 21 de marzo de 2020 en la Cárcel La Modelo”.
Por esta razón, el órgano de control ordenó la práctica de pruebas como una visita al penal y verificar la situación en que se encuentra la cárcel y pidió informes sobre la situación de hacinamiento y las medidas que han adoptado durante la pandemia de COVID-19.
La decisión también cobija a la teniente Elizabeth Vergara, comandante de custodia y vigilancia de la cárcel, quien se encontraba ese día al mando de los guardias del Inpecen el centro penitenciario.
Los informes que la misma cárcel hizo llegar a la Procuraduría durante la indagación preliminar revelan la grave situación que se presentó durante la noche del 21 de marzo, en la que se presentó un amotinamiento y posterior intento de fuga, que fue contenido por la guardia del penal.
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Según estos reportes, el 80% del penal quedó destruido debido a la furia de muchos privados de la libertad que querían escapar argumentando las precarias condiciones en que estaban recluidos, sumado a la situación de contagios de coronavirus.
Testimonios recogidos por la Procuraduría señalan que a algunos de los guardias les fueron arrebatados fusiles con los que los privados intentaron abrirse camino a la fuga.
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