La falta de alimentos, combustibles y movilidad fluvial completa más de un mes en dos municipios del Putumayo (Leguízamo y Guzmán) y tres del Caquetá (Curillo, Solano y Solita), esto porque las disidencias de las Farc de la 'Segunda Marquetalia' y 'Comando Frontera' mantienen paralizado cualquier movimiento de embarcaciones de pasajeros y transporte de carga en el río Caquetá.
Ante esta situación, el alcalde de Leguizamo, Emilio Bustos, habló de este tema pese a las limitaciones que existen en las comunicaciones vía satelital debido al daño de una antena en el río Caquetá. "Tenemos masomenos 35 días con un paro armado que definitivamente nos tiene afectados en temas de comunicaciones y de movilidad por nuestro río Caquetá. Más de 2.000 familias en este momento afectadas", dijo.
"La empresa de servicio Claro estableció que no hay garantías para ellos entrar por el río Caquetá a realizar un diagnóstico, pero sobre todo la reparación de estas fibra óptica o lo que esté fallando en estas comunicaciones (...) Las Fuerzas Militares, la Armada Nacional y el Ejército nacional dicen que el orden público está normalizado, pero, realmente, hemos podido evidenciar que a las personas en este momento algún grupo al margen de la ley les ha exigido que no pueden hacer movimientos y tomar decisiones hasta un nuevo anuncio y se levante ese paro", denunció Bustos, desmintiendo la versión de la fuerza pública.
La parálisis tiene desabastecida a las inspecciones de Mecaya, Yurilla, Sencella, de Leguízamo. Incluso, en esa poblaciones sobre el río Caquetá, los niños no han podido iniciar las clases por la falta de transporte fluvial.
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Según las autoridades, el paro armado es por una guerra declarada por 'Comandos de Frontera', de Iván Márquez, para impedir la avanzada de la otra disidencia 'Carolina Ramírez' de Iván Mordisco. Y cabe recordar que ambos grupos criminales se encuentran en un supuesto "cese del fuego” con el Gobierno del presidente Gustavo Petro.
Los alcaldes de la región afectada por las hostilidades de terrorismo le exigieron al Gobierno nacional devolver la paz y la tranquilidad a los habitantes del oriente del Putumayo y el sur del Caquetá. Por otro lado, la situación también tiene confinados a campesinos de Puerto Guzmán y en los límites entre los municipios de Puerto Caicedo y Puerto Asís.
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