La Procuraduría suspendió e inhabilitó por 18 años al patrullero Brayan Enrique Guzmán Gaitán, integrante del Grupo de Operaciones Especiales de la Policía Metropolitana de Bogotá, tras comprobarse que incurrió en graves actos de violencia intrafamiliar y amenazas de muerte contra su expareja sentimental y su hija menor de edad.
La investigación determinó que el patrullero ejerció un patrón prolongado de maltrato, sustentado en las pruebas aportadas por la víctima con documentos, fotografías y videos que daban cuenta de agresiones reiteradas y hostigamientos permanentes.
Uno de los episodios más graves ocurrió el 8 de noviembre de 2023, fecha en la que, según los registros del proceso, Guzmán desató una serie de agresiones y amenazas que consolidaron la configuración de una falta gravísima cometida con dolo. La Procuraduría destacó que estas conductas no solo pusieron en riesgo la vida de las víctimas, sino que perpetuaron un ambiente de miedo y sometimiento incompatible con los valores que debe representar un miembro de la Policía.
La Procuraduría subrayó que la sanción busca enviar un mensaje claro contra la violencia basada en género, particularmente dentro de la Fuerza Pública, donde no se tolerará que quienes tienen la misión de proteger se conviertan en agresores.