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Desde San Andrés, el presidente Gustavo Petro expresó sus más sentidas condolencias a las familias afectadas por el desastre natural en Quetame, Cundinamarca. El mandatario informó sobre la inestabilidad del terreno en la zona, que ha causado comportamientos anómalos en la quebrada El Naranjal generando una situación de peligro constante.
Para enfrentar la emergencia, el Gobierno destinará recursos para reubicar de manera inmediata a las personas que aún se encuentran en el área afectada. Se están tomando medidas para evitar que el número de víctimas aumente y se ha dispuesto de dos aviones adicionales para establecer un puente aéreo entre Bogotá y Villavicencio, facilitando el transporte de carga pesada y de pasajeros.
“En primer lugar que tengamos que acudir a la emergencia vamos a poner dos aviones más para lograr cinco vuelos que permitan construir un puente aéreo entre Bogotá y Villavicencio, se han trasladado ya los equipos técnicos para implementar la postura de puentes metálicos de rápida instalación”, anunció el mandatario.
El presidente Petro también destacó la importancia de iniciar un debate y diálogo con las comunidades del Llano, su representación social y política territorial, así como la población de Cundinamarca en esa zona del oriente cundinamarqués. El objetivo es establecer no solo medidas de emergencia, sino un proyecto a largo plazo para garantizar la estabilidad en la región. Entre las posibles soluciones, se plantea la creación de una reserva forestal de “filo a filo”, lo que implicaría reubicar actividades en el área.
“Quienes conocen el territorio saben que podría haber mucha más estabilidad si se pudiese sembrar forestalmente, si hubiese allí una reserva forestal de filo a filo, lo cual implica reubicar actividades, etcétera. Quiero discutir esta propuesta con la población misma sobre su viabilidad, sobre la decisión de sus habitantes de aceptarla o no, para parar definitivamente la inestabilidad de la zona, de la carretera, pero fundamentalmente para que una población pueda ordenarse alrededor del agua y no ser víctima del agua”, agregó Petro.
El mandatario enfatizó que estas medidas se discutirán con los habitantes de la región para que puedan participar en la toma de decisiones y se logre establecer un cronograma de soluciones a fondo en los próximos años. El objetivo, señala el jefe de Estado, es poner fin definitivamente a la inestabilidad de la zona y permitir que la población pueda vivir en armonía con el agua.
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