Un total 20 cuerpos han sido recuperados tras la exhumación de diferentes fosas comunes, luego del acuerdo entre la Comisión Nacional de Búsqueda y las delegaciones de los diálogos de paz del Gobierno nacional y el grupo ilegal Frente Comuneros del Sur.
La acción humanitaria se habría centrado en las veredas que están localizadas en inmediaciones a los resguardos indígenas de la Montaña, en zona rural de Samaniego y el Sande en Santacruz de Guachavez, municipios del sur occidente de Nariño.
A pesar de que la información ha sido totalmente hermética, Blu radio conoció que los cuerpos recuperados hasta este momento, después de tres semanas de una intensa búsqueda, podrían pertenecer a guerrilleros de las disidencias de las Farc del Estado Mayor Central Columna Franco Benavides, luego de la confrontación armada que se dio entre estos grupos ilegales a finales de los años 2023 y comienzos del 2024.
Un vocero de la comunidad consultado por Blu radio, y que pidió el anonimato, dijo que esta acción está enmarcada en los diálogos de paz que ya cumplen más de un año y que permitió que el Frente Comuneros del Sur entregara, junto con la comunidad, las coordenadas de las fosas comunes donde fueron hallados los restos humanos.
El líder social dijo que, desde hace más de un mes que se logró ese acuerdo con la Unidad Nacional de Búsqueda de personas desaparecidas, los combatientes y comandantes del grupo ilegal Comuneros del Sur han habilitado todas las zonas donde tienen presencia para que la comisión humanitaria haga el barrido y logre identificar plenamente las zonas donde podrían encontrarse entrados en fosas comunes decenas de personas como civiles y guerrilleros.
Las veredas, hasta este momento intervenidas, son Betania, Buenavista y el Decio que han parte del resguardo de la Montaña en zona rural de Samaniego, Resguardo el Sande, Alto Moreno y Sabaleta, que hacen parte del sector rural del municipio de Santa Cruz de Guachavez.
"Otros tres cuerpos también fueron entregados a la comisión humanitaria en zona rural de Cumbal en el sur de Nariño, pero ninguno, hasta el momento, ha sido identificado", aseguró el vocero comunitario.
En Nariño, familias de personas siguen buscando a sus desaparecidos y dicen que cumplen más de 30 y 40 años en esta labor y tienen la fe y la esperanza de saber qué pasó y dónde están sus seres queridos y aseguran que esto es gracias a los diálogos de paz que se desarrollan en el departamento.
En el suroccidente del país y pacifico nariñense, familiares que buscan a sus seres queridos dicen que no temen llegar a lugares inhóspitos y recorrer cuantos municipios les digan y exigen respuestas sin importar poner en riesgo su integridad.
Afirman que jamás desistirán en su propósito de hallarlos con vida o muertos, pero, de algo si están seguros, es que quieren acabar con la incertidumbre que hasta hoy tienen por culpa de su desaparición forzada.