Reforma a la salud: Carf desmiente a Gobierno y calcula déficit de 126 billones en la próxima década
El Ministerio de Hacienda avaló la reforma a la salud con el argumento de que generará un superávit en los próximos años. Las estimaciones del Carf concluyen en cambio que se viene un gigantesco déficit con reforma o sin ella.
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El Comité Autónomo de la Regla Fiscal (Carf) está contradiciendo el aval fiscal del gobierno y concluye en un informe técnico que la reforma a la salud no va a generar un superávit, sino que va a causar un déficit acumulado de al menos 126 billones de pesos en la próxima década. Quedarse sin ninguna reforma tampoco resolvería todos los problemas porque el déficit estructural del sistema de salud empeorará en los próximos años según las proyecciones.
El Ministerio de Hacienda le dio su aval a la reforma a la salud y sostuvo que el nuevo esquema propuesto por el gobierno es compatible con las finanzas públicas, entre otras cosas porque, según sus cálculos, a mediano plazo llevaría a un superávit del sistema.
Sin embargo, el Carf tiene una visión completamente distinta. Los cálculos del comité (que tiene acceso a información de primera mano) apuntan a que, si se aprueba la reforma, se requerirá un esfuerzo fiscal adicional de 0.5 % del PIB por año debido a los nuevos gastos que tendría que asumir el gobierno "debido a los usos nuevos de la reforma relacionados con el fortalecimiento de la red pública, prestaciones de maternidad de no cotizantes, incentivos a la calidad, unidades zonales de planeación y formalización del talento humano en salud".
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Foto: X @ingwilmerc
En el informe, el comité señaló además que en realidad no hay nuevos ingresos para el sistema de salud, ya que el recaudo de impuestos saludables o las destinaciones directas para el sistema de salud son ingresos que el gobierno tendría que reponer para financiar otras áreas de funcionamiento.
El Carf advierte que su informe podría estar subestimando la evolución de los gastos en los próximos años. En primer lugar, el riesgo financiero del sistema queda concentrado en un actor del gobierno (la Adres) y no se compartiría con agentes como las EPS. En segundo lugar, hay hechos que podrían aumentar el gasto en los próximos años, como el envejecimiento de la población o nuevas tecnologías en salud. Finalmente, el comité advierte que la ley de competencias y la reforma al sistema general de participaciones también podrían modificar las perspectivas del gasto en salud para los próximos años.
¿Qué pasa sin reforma a la salud?
Si el sistema de salud sigue operando tal y como está hoy, el déficit del sistema pasaría del 1,9 % del PIB en 2024 a 3,7 % del PIB en 2036; es decir, en pesos, el país tendría que pasar de un aporte de 45.5 billones al año a uno de 92.4 billones.
"En cualquier caso, es necesario elaborar una estrategia, más allá de la reforma, para identificar los instrumentos financieros que resuelvan en un plazo definido las acreencias del sistema", concluye el informe.