En un video registrado en San José del Guaviare se evidencia cómo el negocio de la prostitución impacta a las menores de edad en esta zona del país, pues en la grabación se pueden ver a las niñas de comunidades indígenas expuestas a abuso sexual, al consumo y tráfico de drogas.
En el video se ve a un hombre, quien al parecer no pertenece a ninguna comunidad indígena, ofreciéndoles algo a tres niñas indígenas. Las menores salen corriendo luego del encuentro con esta persona y una de ellas, la del saco gris , sujeta algo con su mano.
Tras seguir el recorrido de las niñas, estas llegaron hasta un lugar oscuro, donde escondidas inhalaban químicos como pegante bóxer: "Miraban al cielo y solo se reían, es una situación que parte el alma, pues estas niñas tienen entre 9 y 10 años. Les preguntamos donde estaba su familia y una de ella señaló y dijo: 'esa de allá es mi mamá', cuando volteamos a mirar vimos que una mujer salió corriendo. No la pudimos identificar, pero según cuentan las niñas y lo que se pudo percibir, todo pasa ante los ojos de sus familiares".
Llegó la Policía en medio de un operativo conjunto con la Procuraduría, momento en el que una de las menores de edad indígenas se escapó.
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El coronel de la Policía Daimiro Heras, señaló que esta situación es uno de los panoramas que se viven a diario en esta zona del país con las menores de edad.
El procurador delegado para asuntos étnicos, Jefferson Mena, también estaba en el lugar de los hechos cuando, todo sucedió y asombrado, manifestó que desde el Ministerio Público activarán los controles no solo municipales, sino también del Gobierno Nacional, debido a la gravedad y el atropello contra la niñez que se pudo observar en ese sector.
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La niña que no logró escapar, fue conducida por la Policía al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, donde deben hacer todo un proceso de restablecimiento de sus derechos.
En una carta conocida por Blu Radio, escrita por indígenas de las comunidades Nukak Maku y Jiuw, dirigida al defensor del pueblo, piden a gritos presencia del Estado, pues aseguran ser victimas del desplazamiento forzado, violaciones de mujeres y niñas, violencia contra la mujer, daño físico, psicológico y discriminación.
La Defensoría del Pueblo entregó un informe que revela las vulneraciones a los derechos humanos de las comunidades indígenas en Guaviare. Según el documento, desde la regional de la entidad se atendieron 933 casos relacionados con la vulneración de los derechos de la población indígena entre 2020 y 2022.
El defensor del pueblo Camilo Camargo asegura que se han atendido 68 casos de presunta violencia sexual en los que se encuentran involucrados menores de edad y que, además, hubo un incremento en esos casos en los últimos tres años: “Mientras en 2020 registramos 67 casos, la cifra llegó hasta los 81 casos durante 2022, algunos con miembros de la fuerza pública involucrados.
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