Una denuncia sobre la presencia de una mancha de hidrocarburo en la ciénaga San Silvestre en Barrancabermeja fue hecha por pescadores, lo que llevó a una reunión del Consejo Distrital de Gestión del Riesgo, en el que hizo presencia de representantes de la firma Cenit empresa filial de Ecopetrol, que dio detalles sobre el origen del incidente.Durante una inspección al sector conocido como La Represa, fue hallado material tipo lona que, según las autoridades, es comúnmente usado para almacenar hidrocarburos hurtados.“A partir de este hallazgo, se presume que las manchas aceitosas observadas en la ciénaga pudieron provenir de este tipo de material, lo que indica que el origen del hidrocarburo en el sector está relacionado con actividades ilícitas y no con una falla en la infraestructura oficial”, fue una de las conclusiones de la reunión liderada por el Comité de Gestión del Riesgo de Barrancabermeja.Igualmente, se descartó por parte de Cenit, empresa filial de Ecopetrol, daños a los ductos de transporte de hidrocarburos y no hay evidencia de pérdida de presión de estos.“Como medida preventiva, se anunció que la autoridad ambiental realizará una inspección en la zona este mismo día para evaluar más a fondo la situación y establecer las posibles consecuencias para el ecosistema local”, confirmó la oficina de Gestión del Riesgo.La Secretaría del Interior liderará un espacio de seguridad para diseñar estrategias que prevengan futuros incidentes relacionados con afectaciones a la infraestructura de hidrocarburos en la región. Durante este espacio, se invitará a las áreas de seguridad física de empresas como Cenit, Ecopetrol, TGI y Mansarovar, con el objetivo de formar un frente común contra aquellos que intenten dañar la infraestructura petrolera.
Un grave derrame de combustible afecta a la quebrada Canime en la vereda La Corcovada, zona rural de Cimitarra, Santander, luego de una pérdida de contención en el poliducto Sebastopol – Santa Rosa, operado por Cenit, filial de Ecopetrol. La empresa informó que activó de inmediato el Plan de Emergencia y Contingencia (PEC) para mitigar los impactos y garantizar la seguridad en la zona.Según el comunicado oficial, entre las medidas implementadas destacan la instalación de barreras de contención en la quebrada afectada, el despliegue de un equipo técnico especializado, y la coordinación con el Consejo Municipal de Gestión del Riesgo, Bomberos Voluntarios y la Secretaría de Gobierno local. Las autoridades también han advertido a la comunidad sobre los riesgos asociados al uso del agua contaminada y han pedido evitar encender fuego en el área afectada mientras continúan las labores de atención y evaluación.Por ahora, las causas del daño en la tubería son objeto de investigación, mientras que los equipos técnicos trabajan para controlar la emergencia y prevenir una mayor propagación del combustible.El incidente ha generado preocupación en la comunidad de Cimitarra, donde los líderes locales solicitan a las autoridades ambientales una pronta intervención para determinar los impactos en la flora, fauna y la salud pública.
El Gobernador de Santander, Juvenal Díaz, hizo un llamado a la acción sobre uno de los principales problemas ambientales que enfrenta la región, la falta de plantas de tratamiento de aguas residuales (PTAR) en más de la mitad de los municipios del departamento.Durante su intervención en la Tercera Cumbre de Páramos, que se realiza en Bucaramanga, Díaz destacó que el 50% de los municipios santandereanos, unos 44 en total, no cuentan con infraestructura adecuada para tratar las aguas residuales, lo que está generando un grave impacto en los afluentes y poniendo en riesgo la salud pública.“En el 50% de los municipios de Santander no tenemos planta de tratamiento de aguas residuales, esto incluye a Bucaramanga. Estamos trabajando en acción unificada con el Gobierno nacional y las alcaldías del área metropolitana para iniciar la construcción de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales del río de Oro, que trataría las aguas residuales de Bucaramanga”, afirmó el gobernador.La Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) del río de Oro, un proyecto clave para la región, podría costar alrededor de $1.2 billones, según cálculos iniciales. Sin embargo, la inversión necesaria para cubrir todas las PTAR, acueductos, colectores de agua y alcantarillados en la región asciende a más de $1 billón.Díaz también subrayó que, de no avanzar en la construcción de estas plantas, los afluentes de los ríos y quebradas en Santander seguirían recibiendo vertimientos de aguas residuales sin tratar, lo que pondría en riesgo la calidad del agua y afectaría la salud de las personas. En este sentido, destacó que ya se ha logrado la puesta en funcionamiento de la PTAR de Curití, pero aún queda pendiente la construcción de plantas en municipios como San Gil y otros en la región.“El avance en la construcción de plantas de tratamiento de aguas residuales es fundamental para la protección de nuestros recursos hídricos. Si no actuamos a tiempo, los ríos y quebradas seguirán contaminándose, y esto afectará no solo al medio ambiente, sino directamente a la salud de nuestros ciudadanos”, expresó el gobernador.En el mismo evento, el alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, también se refirió al tema y destacó la importancia de implementar soluciones ya sea con una planta de tratamiento grande o con PTAR más pequeñas.“Necesitamos avanzar más rápido en cómo tratamos el agua, ya sea con una gran PTAR o con sistemas más pequeños por sectores. El costo es alto, pero hemos comenzado a trabajar para hacer un tratamiento sectorial que permita garantizar que el agua que recibimos esté limpia, y que esa agua tratada también pueda ser compartida con otros municipios”, explicó Beltrán.Ambos funcionarios coincidieron en la necesidad de seguir fortaleciendo la cooperación entre los gobiernos departamental, nacional y municipal, así como con las comunidades, para asegurar que los proyectos de tratamiento de aguas residuales avancen de manera eficiente y sostenible.
Publicidades, propaganda política, información de servicios y demás elementos cubren regularmente los postes de luz de Medellín, ante esta situación que genera, entre otros, contaminación visual para habitantes y visitantes de la capital de Antioquia, la alcaldía emprendió un plan para limpiarlos. No obstante, la operación no es tan fácil como parece, ya que requiere bastante dinero y personas que realicen la tarea.La información entregada recientemente por la Administración Distrital indica que se tiene el registro de 178 mil postes de luz distribuidos por toda la capital antioqueña y en un gran porcentaje de ellos hay publicidad de todo tipo, misma que, incluso, se ha acumulado por años una encima de otra.La secretaria de Medio Ambiente de Medellín, Ana Ligia Mora, destacó que este año se han invertido algunos recursos con el fin de regresar a la 'Tacita de Plata', una de las banderas de Federico Gutiérrez en su segundo mandato como alcalde de Medellín."Si uno hace un promedio más o menos estaríamos hablando de casi 200 millones de pesos invertidos por parte del Distrito en esas actividades este año", manifestó la secretaria.Recuerdan las autoridades que el solo hecho de pegar material publicitario en espacio público ya es una actividad irregular que podrían generar sanciones tanto a las personas que lo hacen como a las empresas que pagan por poner la información de sus negocios en los postes de luz. Por ello, y como forma de prevenir la situación, la alcaldía de Medellín está llamando a los números que aparecen en los avisos para advertirles de posibles sanciones.Por último y con las estimaciones que realiza el Distrito a la ciudad le valdría nada más y nada más que más de mil millones de pesos poder limpiar todos los postes de luz, una cifra considerable si se tiene en cuenta que las personas pegan de manera gratuita su publicidad en estos elementos del espacio público.
Belman Ramírez, vicepresidente de Poliductos de Cenit, empresa filial de Ecopetrol, denunció que durante el año 2024 se han identificado y removido 130 válvulas ilícitas instaladas en el poliducto Pozos Galán, infraestructura clave para el transporte de gasolina, diésel y nafta en el país. El poliducto, que tiene una longitud de 511 kilómetros y conecta el terminal marítimo de Pozos Colorados en Santa Marta con el centro del país atravesando los departamentos de Magdalena, Cesar, Norte de Santander y Santander, es responsable de transportar el 40% del combustible que consumen los colombianos.Así lo reveló Ramírez, en medio de la atención a la emergencia que se registra desde hace tres días en la vereda Campo Gala, en el municipio de Barrancabermeja, Santander, donde la instalación de una válvula ilícita en el poliducto Pozos Galán provocó contaminación sobre el caño San Silvestre. "Logramos clausurar la válvula ilícita y cerrar la fuga de producto, instalando más de 200 metros de barreras para proteger el acuífero del caño San Silvestre", explicó el vicepresidente.Este delito, conocido como apoderamiento de hidrocarburos, representa una grave amenaza para las comunidades y el medio ambiente. Ramírez hizo un llamado urgente para que cesen estas acciones ilegales que ponen en riesgo la seguridad de las poblaciones cercanas, la sostenibilidad energética y los recursos naturales del país“La instalación ilegal de válvulas en los poliductos pone en riesgo la salud y la vida de las comunidades aledañas, los cultivos, escuelas y fuentes de agua, y puede generar desastres graves en caso de derrames o explosiones. Además, estas intervenciones contaminan el suelo y las fuentes hídricas, afectando tanto a la flora y fauna local como al agua potable de las regiones”, dice la empresa Cenit.La empresa también señaló que ante este tipo de situaciones despliega de manera inmediata sus equipos de atención a emergencias y mantenimiento para remover las válvulas ilícitas, contener posibles fugas y mitigar los daños ambientales. En el caso de Campo Gala, se implementaron dos puntos de control adicionales: uno en la bocatoma de Barrancabermeja y otro en la llegada al río Sogamoso, para evitar que la iridiscencia del combustible alcanzara estas áreas clave para el abastecimiento de agua.Cenit también trabaja en coordinación con la Gobernación de Santander, la Alcaldía de Barrancabermeja, la Corporación Autónoma Regional (CAR) y la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), informando a las autoridades competentes y denunciando cada caso ante la Fiscalía General de la Nación.
La Procuraduría 158 Judicial II Administrativo emitió un concepto en el que advierte sobre el creciente riesgo para la seguridad aérea en el aeropuerto internacional Palonegro de Bucaramanga debido a la proliferación de gallinazos en sus inmediaciones.El documento, presentado como parte de una acción popular, señala que la presencia de estas aves carroñeras, que son atraídas principalmente por el relleno sanitario El Carrasco, ubicado a menos de 5 kilómetros del aeropuerto, supone una seria amenaza para las operaciones aéreas.El concepto resalta que en los últimos diez años se han registrado 13 incidentes entre gallinazos y aeronaves en el aeropuerto, algunos de los cuales han causado daños materiales a las aeronaves, especialmente en partes críticas como los parabrisas, los fuselajes y los motores.El origen del problema radica en la cercanía del aeropuerto con el relleno sanitario El Carrasco, que continúa operando a pesar de la sentencia judicial para su cierre, prorrogado repetidamente, y con cierre definitivo previsto hasta abril de 2027.Además del relleno sanitario, la Procuraduría señala otros focos de atracción para las aves en los alrededores del aeropuerto, entre ellos mataderos clandestinos, plazas de mercado, fuentes hídricas contaminadas y asentamientos humanos con inadecuada disposición de residuos. Son 102 focos distribuidos en municipios cercanos como Bucaramanga, Girón, Lebrija y Floridablanca, que contribuyen a crear condiciones ideales para la proliferación de gallinazos y otras especies de fauna que ponen en riesgo las operaciones aéreas.En respuesta a la problemática, la Aeronáutica Civil ha implementado varias medidas para controlar la presencia de aves, incluyendo el uso de drones, cañones de gas, pirotecnia especializada, voladores, e incluso la utilización de un "falco-robot", un aeromodelo que simula un ave rapaz para ahuyentar a los gallinazos. Sin embargo, estas medidas no han sido lo suficientemente efectivas para mitigar el problema.La Procuraduría, tras analizar las acciones implementadas hasta la fecha, concluyó que la situación sigue siendo alarmante y requiere de medidas más estrictas para garantizar la seguridad aérea en Palonegro. En este sentido, propone que, de acuerdo con las facultades otorgadas a la Aeronáutica Civil por la Resolución No. 00557 de 2022, se evalúe la posibilidad de implementar la suspensión parcial o total de operaciones aéreas en horarios de mayor riesgo, como medida preventiva hasta que se implementen los correctivos necesarios.La propuesta incluye un plan de acción a corto, mediano y largo plazo, que contemple no solo la mejora en las medidas de dispersión de las aves, sino también la intervención directa en los focos de atracción, como el relleno sanitario El Carrasco, los mataderos clandestinos y los mercados, donde el mal manejo de los residuos genera condiciones favorables para la proliferación de gallinazos.Finalmente, hace un llamado a las autoridades municipales, ambientales y sanitarias para que fortalezcan la vigilancia sobre el manejo de los residuos sólidos en sus respectivas jurisdicciones.Esta es la conclusión del concepto del 3 de septiembre de 2024 de la Procuraduría sobre operaciones del aeropuerto Palonegro.
La contaminación bacteriana y los microplásticos amenazan la Ciénaga Grande de Santa Marta, que es el mayor sistema lacunar costero y productivo en pesca del Caribe colombiano.Un estudio liderado por investigadores de la Universidad de Barcelona (UB), en España, y del Instituto colombiano de Investigaciones Marinas y Costeras (INVEMAR) ha alertado sobre el impacto de la contaminación por microplásticos y bacterias patógenas en sedimentos y en el trato digestivo de peces de la zona, ha informado la UB.En los peces consumidos por la población local también se han encontrado microplásticos, lo que implica un riesgo aún mayor para todo el ecosistema natural y la salud humana, ha añadido la universidad.Así lo concluye un artículo publicado en la revista Journal of Hazardous Materials, dirigido por los investigadores Ostin Garcés-Ordóñez y Miquel Canals, del Grupo de Investigación Consolidado en Geociencias Marinas de la Facultad de Ciencias de la Tierra de la UB.Con una extensión de 1.321 km², la Ciénaga Grande de Santa Marta es un ecosistema lacustre de escasa profundidad (entre 1 y 1,8 metros), que recibe agua dulce de cuatro ríos y agua marina a través de un canal de conexión con el mar Caribe.Flanqueada por manglares, alberga dos parques nacionales, figura en la lista de la Convención de Ramsar sobre las marismas, y es un complejo lacunar estratégico para la conservación de la biodiversidad.Además, se trata de una ecorregión de gran riqueza faunística y florística, donde la pesca es esencial para el mantenimiento de las comunidades locales.Con una circulación de agua limitada y poca profundidad, las lagunas se exponen a la llegada constante de contaminantes a través de ríos, descargas de aguas residuales o vertidos directos, que favorecen la acumulación de plásticos y la proliferación de bacterias potencialmente patógenas en el medio natural, ha indicado la UB.El estudio ha identificado diecinueve especies bacterianas potencialmente patógenas en los microplásticos analizados.Aeromonas caviae, la especie más prevalente, puede causar gastroenteritis y se encontró, junto a la bacteria anaeróbica Pantoea sp, en microplásticos extraídos de muestras de agua, de sedimentos y del tracto digestivo de peces que se consumen de forma habitual.Las especies Enterobacter roggenkampii y Pseudomonas fluorescens, que también pueden causar infecciones, se localizaron en microplásticos extraídos del agua y en peces.Por otra parte, la bacteria responsable del cólera, Vibrio cholerae, fue la segunda más abundante, aunque sólo se encontró en microplásticos en el agua.Para saber si estas bacterias son capaces de desencadenar brotes de enfermedades en peces y humanos del entorno de la Ciénaga Grande de Santa Marta, "debería confirmarse la presencia de los genes de virulencia necesarios para ello, por lo que ésta sería una de las líneas de investigación en las que habría que profundizar en futuros estudios", ha apuntado el investigador Ostin Garcés-Ordóñez.Los análisis también han permitido identificar un total de sesenta y cinco filos bacterianos y 1.760 géneros bacterianos.Soluciones para lagunas costeras de todo el mundoEstablecer un sistema de alerta temprana podría ayudar a identificar situaciones de riesgo y pronosticarlas con antelación suficiente, según los expertos, que aconsejan "una comunicación rápida y protocolos de emergencia –con la participación de científicos, personal sanitario y comunidades locales–, para alertar sobre los posibles brotes de enfermedades infecciosas en la zona".También indican que "habría que fortalecer la gobernanza, mejorar la infraestructura de saneamiento y la atención sanitaria, así como la educación y la capacitación de diferentes agentes sociales para realizar seguimientos a largo plazo"."Nuestro diagnóstico subraya la necesidad de implementar estrategias integradas de gestión ambiental y salud pública", apuntan los expertos, que son autores también del estudio 'Environmental Pollution, 2022' que alertaba de la situación alarmante que causa la contaminación por microplásticos en cincuenta lagunas costeras de todo el mundo."Esta nueva investigación presenta un modelo conceptual sobre los riesgos ambientales para la laguna y las comunidades humanas de su entorno. Se trata de un escenario muy vulnerable, porque es un sistema semicerrado, con una economía limitada, una deficiente atención sanitaria y una gran dependencia de los recursos pesqueros", han subrayado.Para los expertos, la Ciénaga Grande de Santa Marta representa un modelo ideal para analizar una problemática sanitaria y medioambiental que afecta a muchas lagunas en todo el planeta."Estudiar este sistema ayudará no sólo a generar nuevos conocimientos, sino también a desarrollar estrategias efectivas para gestionar los riesgos ambientales asociados a este tipo de contaminación, así como a extrapolar estrategias que mejoren el estado medioambiental de lagunas costeras afectadas en otras regiones del mundo", han concluido.
La música a alto volumen de los vecinos, el constante paso de camiones, autos y motos por las avenidas, junto con el bullicio de bares, construcciones e industrias, generan un nivel de ruido tan intenso que miles de bogotanos se ven obligados a soportarlo a diario.La contaminación auditiva es uno de los factores que más afectan la calidad de vida en la capital ocasionando problemas de salud como estrés, trastornos del sueño y otras afecciones. Hay localidades donde el ruido es mucho más alto y constante que otras. ¿Qué localidad es la más ruidosa de Bogotá? Según un reporte que le entregó la Secretaría de Ambiente a Blu Radio con cifras del 2024, Kennedy es la localidad con mayor afectación por contaminación auditiva. El ruido mayoritariamente proviene de zonas de bares y rumba, las principales avenidas que cruzan por la localidad junto a las que están en obras, y la zonas industriales, hacen que Kennedy sufra por el exceso de ruido. Y lleva años con esta problemática, en 2012 ya se reportaba que de los niveles máximos permitidos por la normatividad para un sector residencial es de 55 decibeles de noche y 65 en el día, en Kennedy se registraron entre 75 y 90 decibeles en los siete puntos críticos. Estas son las localidades más ruidosas de Bogotá:A partir de la última actualización de los Mapas Estratégicos de Ruido (MER) del Distrito, se identificaron las zonas con mayor contaminación sonora o alto impacto por ruido, ubicadas en las localidades:Kennedy Engativá Suba Chapinero Usaquén Fontibón Barrios Unidos Antonio Nariño¿Cuántas quejas se han atendido este año por ruido excesivo?Durante 2024, la Secretaría de Ambiente ha atendido 3.720 solicitudes ciudadanas relacionadas con la emisión de ruido y contaminación acústica en Bogotá. Es importante precisar que solo el 35 % (1.302) de ellas corresponden a establecimientos de comercio, industria o servicios que, presuntamente, han causado un daño ambiental por emisiones sonoras.Las demás solicitudes corresponden a situaciones que han sido trasladadas a otras entidades competentes en el control del ruido, tales como: perifoneo, invasión del espacio público, cuestiones de legalidad, vibraciones, riñas, vecinos ruidosos, afectación a la tranquilidad y convivencia, entre otros trámites.Recomendaciones para establecimientos nocturnos (bares, gastrobares y discotecas)Realiza la insonorización del lugar.Usa altavoces dentro del establecimiento a un volumen moderado para evitar que el sonido se propague al exterior.Recuerda que el perifoneo está prohibido.Respeta los horarios establecidos para el desarrollo de tu actividad.La Secretaría ha intensificado sus esfuerzos no solo mediante inspecciones y seguimientos a establecimientos, sino también a través de campañas educativas dirigidas a la ciudadanía. Durante este año, se han realizado 547 visitas en materia de emisión de ruido a empresas de industria, comercio y servicios en las 19 localidades urbanas de Bogotá.
La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca, CAR, emitió una alerta de nivel de prevención por contaminación atmosférica en el sector Mochuelo, ubicado en el área rural de Bogotá. Esta decisión responde a un reciente monitoreo que ha mostrado un aumento significativo en los niveles de material particulado, relacionado con los vientos provenientes de los Llanos Orientales y la Amazonía. Estas regiones enfrentan varios focos de calor debido a incendios forestales, lo que agrava la situación en la Sabana de Bogotá.El incremento en la concentración de contaminantes en el aire se debe también a fenómenos meteorológicos como la inversión térmica y bajas temperaturas matutinas que afectan la dispersión de contaminantes. Según la normativa vigente, el nivel de prevención, o nivel II, se declara cuando las concentraciones de contaminantes y su tiempo de exposición de 24 horas pueden causar efectos adversos sobre la salud humana y el ambiente, tales como irritación de mucosas, alergias, enfermedades respiratorias, y disminución de la visibilidad.Alfred Ignacio Ballesteros, director general de la CAR, destacó que “La falta de lluvias y la baja humedad han contribuido a una mayor concentración de material particulado. Sin embargo, esperamos que, en los próximos días, con la llegada de humedad y posibles lluvias, estas concentraciones disminuyan, mejorando la calidad del aire en nuestra jurisdicción”.En respuesta a la alerta, la CAR ha fortalecido sus labores de vigilancia en los municipios cercanos, como Soacha, Funza, Madrid, Facatativá, Cota, Sopo, Tocancipá y Zipaquirá. Se están implementando estrategias y acciones para mitigar el impacto de la contaminación, incluyendo la regulación de quema controlada y la supervisión de industrias que operan con calderas o equipos a base de carbón.Además, la CAR colaborará con las autoridades de tránsito para agilizar la circulación vehicular en los sectores afectados y controlar la contaminación generada por el transporte motorizado. Se han emitido recomendaciones para la comunidad, tales como usar tapabocas, evitar actividades físicas al aire libre entre las 6:00 de la mañana y las 10 de la mañana utilizar eficientemente los sistemas de transporte, y abstenerse de quemar basura o materiales como carbón o madera.
Los organizadores de los Juegos Olímpicos de París cancelaron este martes los entrenamientos de cara a las pruebas de natación de aguas abiertas en el río Sena, debido a la contaminación y apenas un día después de que se disputara allí el triatlón por equipos mixtos.Es la quinta vez que los organizadores suspenden los entrenamientos en el río desde el inicio de los Juegos, debido a que los niveles de las bacterias fecales E.Coli y Enterococcus están por encima de los límites exigido por los organismos deportivos para dar luz verde al nado de los deportistas.Un comunicado de World Aquatics y del comité organizador anunciaba a primera hora del martes que una de cada cuatro lecturas de bacterias en el río -un indicador de la presencia de materia fecal- superaba el límite máximo autorizado."Extrema precaución""Esta decisión (la de cancelar el entrenamiento) se ha tomado por extrema precaución", señala la misiva.Desde que se eligió lugar para el triatlón y la competencia de aguas abiertas, las autoridades francesas han emprendido una carrera contrarreloj para limpiar la vía fluvial.El triatlón se vio gravemente perturbado la semana pasada por las malas lecturas de bacterias, con todas las sesiones de entrenamiento de natación canceladas y la carrera individual masculina aplazada 24 horas hasta el miércoles.La carrera de relevos mixtos también se puso en duda el lunes, pero finalmente se disputó según lo previsto, y Alemania se hizo con el oro.Sin embargo, el maratón de la natación -una carrera de 10 kilómetros en aguas abiertas- se celebrará el jueves para las mujeres y el viernes para los hombres.Alarmas encendidasAmbos eventos, el triatlón y la maratón de aguas abiertas son supervisados por diferentes organismos rectores, World Aquatics y Triatlón Mundial, respectivamente.Los resultados de los análisis del agua se comunicaron a los triatletas antes de la carrera del lunes, incluida una lectura de bacterias por encima de los límites, y ninguno de ellos planteó objeciones, explicó el comité organizador.Sin embargo, varios triatletas han expresado su frustración por las repetidas cancelaciones de entrenamientos y el suspense sobre si sus carreras seguirían adelante.El equipo belga no compitió el lunes en el relevo mixto después de que su atleta Claire Michel cayera enferma, al parecer de E. Coli, tras haber nadado en el Sena durante el triatlón individual femenino del pasado miércoles.Tanto miembros del equipo suizo como del noruego sufrieron trastornos estomacales después de nadar en el Sena la semana pasada, pero ninguno de ellos los relacionó directamente con problemas de calidad del agua.Otros triatletas han defendido el uso del Sena, afirmando que no se han visto afectados y que están acostumbrados a nadar en cursos de agua mucho más contaminados."Si como el 99% de los atletas no tienen ningún problema, creo que está bien", dijo el alemán Tim Hellwing, ganador del oro el lunes en la competencia por equipos."Noticias falsas", según HidalgoLos organizadores han dicho que la natación de maratón puede trasladarse a otro lugar en Vaires-sur-Marne, al río Marne, al este de París, si el Sena está demasiado contaminado para su uso.Sin embargo, dijeron el martes que están "muy seguros" de que el Sena albergaría todas las pruebas."No tiene sentido dar crédito a noticias falsas. Ningún atleta enfermó por bañarse en el Sena. Dejemos de prestar atención y de permitir que continúen estas 'fake news' cuando se ha demostrado que son falsas. El Sena ha sido limpiado. (...) No entiendo que se diga que no funciona", dijo a la AFP Anne Hidalgo, la alcaldesa de París."Mañana esperaremos los resultados de las mediciones. En el maratón de 10 km en aguas abiertas, los atletas pasan más tiempo en el Sena, hay una mejora muy clara gracias a las condiciones meteorológicas", aseveró Hidalgo, que días antes de la ceremonia de apertura de los Juegos se bañó en el Sena en un intento de mostrar confianza en la calidad del agua.Le puede interesar: