El sistema político en Colombia se está haciendo agua
La Corte Suprema de Justicia sigue dando duros golpes en contra de la corrupción.
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En las últimas horas fue capturado en el aeropuerto El Dorado de Bogotá el senador liberal barranquillero Álvaro Ashton, investigado por el delito de concierto para delinquir agravado, por sus presuntos vínculos con grupos paramilitares.
Ashton estaba en "capilla" desde hace varios años en la Corte Suprema, sin embargo, su caso estaba engavetado en el despacho del magistrado Gustavo Malo, hoy en licencia e investigado por ser el presunto socio del expresidente de la Corte Francisco Ricaurte y de Gustavo Moreno en el llamado "cartel de la toga”.
Ese caso dormía el sueño de los justos y solamente cuando llegó al despacho del magistrado Eugenio Fernández, se movió y se tomó la determinación de detener a Ashton, gran barón electoral del partido liberal en el Atlántico,por considerar que podría existir riesgo de fuga y ante la gravedad del delito cometido presuntamente.
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Ashton deberá responder este lunes 11 de diciembre en diligencia de indagatoria y la Corte definirá si lo envía o no a la cárcel La Picota, a acompañar a otros dos congresistas de la Costa Caribe: el senador de La U Musa Besaile detenido por el mismo escándalo, el cartel de la toga y Bernardo "Ñoño" Elías, investigado por el caso Odebrecht.
A Ashton todavía le queda por responder ante la justicia por el cartel de la toga, es decir por el pago presunto de cerca de 600 millones de pesos para evitar su captura en su momento, por el escándalo de bienes de Estupefacientes y hasta por un terrible caso de presunto abuso sexual a menores de edad.
En materia política, esta decisión es un golpe muy duro al liberalismo, a pocas horas del cierre de las inscripciones al Congreso. Ashton, barón electoral de la Costa, que apoyó a Humberto De La Calle en la consulta liberal, ahora está detenido. Una razón más para concluir que el sistema político en Colombia está haciendo agua.
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