Vigilantes de la U. Nacional denuncian falta de garantías y agresiones en medio de disturbios
La División de Vigilancia y Seguridad alertó sobre el riesgo permanente en que trabajan sus integrantes y rechazó la versión oficial de la Vicerrectoría sobre los recientes hechos violentos en el campus de Bogotá.
Protestas Universidad Nacional el 10 de septiembre
Un fuerte pronunciamiento hizo público la División de Vigilancia y Seguridad de la Universidad Nacional de Colombia, tras los disturbios registrados en la sede Bogotá que dejaron dos motocicletas incendiadas y agresiones contra el personal encargado de proteger a la comunidad universitaria.
En el comunicado, los vigilantes expresan su profunda preocupación por la falta de garantías para ejercer su labor, asegurando que trabajan en un escenario de constante exposición a riesgos que amenazan su integridad física y hasta sus vidas. Señalan que, pese a que su misión es proteger a los estudiantes, docentes y las instalaciones de la institución, las actuales condiciones impiden ejercer controles efectivos sobre el ingreso de personas externas al campus, lo que ha derivado en repetidos daños materiales y amenazas a la seguridad de toda la comunidad universitaria.
Rechazaron también de manera categórica el comunicado de la Vicerrectoría de la sede Bogotá, en el que se afirmaba que el personal de vigilancia se habría enfrentado con los estudiantes durante la asonada. “No es cierto, fuimos objeto de vejámenes, ofensas verbales, escupitajos y malos tratos”, hechos que, aseguran, no fueron reconocidos ni rechazados por la administración en su versión oficial.
Desórdenes al interior de la Universidad Nacional en Bogotá
Foto: captura de video
El documento detalla que, además de las motos incineradas, el pasado domingo 21 de septiembre varias personas ingresaron de manera violenta al campus por distintos puntos, vulnerando el perímetro de las mallas. Al ser interceptados, según los vigilantes, los intrusos respondieron con agresiones verbales y físicas antes de huir nuevamente, en un acto que describen como provocación y burla hacia el personal de seguridad.
Finalmente, los trabajadores hicieron un llamado urgente a la rectoría para que adopte medidas inmediatas que garanticen un trabajo digno, con herramientas sostenibles que les permitan cumplir su labor sin estar expuestos a agresiones permanentes. “Nuestra voz se levanta en defensa del derecho al trabajo digno y con garantías”, concluye el comunicado, en el que reiteran que su labor busca preservar el carácter público, autónomo y de convivencia de la Universidad Nacional.