Estudio revela que los hombres sienten atracción entre ellos cuando están borrachos
Una investigación reveló un efecto inesperado del alcohol en el comportamiento masculino.
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Las bebidas alcohólicas son protagonistas habituales en celebraciones, fiestas y reuniones sociales. El consumo moderado es común entre adultos, pero el exceso de alcohol puede provocar una serie de cambios en el comportamiento, en la percepción y en las decisiones que se toman bajo sus efectos.
En este contexto, un grupo de investigadores decidió analizar cómo las bebidas alcohólicas influyen en el deseo sexual y la atracción interpersonal, particularmente en hombres heterosexuales.
La investigación fue publicada en la revista científica The Journal of Social Psychology y liderada por los académicos Beanne Helmers, Colin Harbke y Julie Herbstrith, de las universidades de Illinois Oeste y del Estado de Wayne, en Estados Unidos. En ella participaron 83 hombres heterosexuales, quienes fueron observados en bares y espacios de ocio mientras consumían alcohol.
Durante las sesiones, se les preguntaba con qué personas del grupo –hombres o mujeres– estarían dispuestos a tener relaciones sexuales. Aunque en un inicio la mayoría de respuestas apuntaban a mujeres, a medida que aumentaba la cantidad de alcohol ingerido, la percepción cambiaba.
Según los autores del estudio, los participantes que pasaban las 10 copas de licor comenzaban a manifestar atracción tanto por mujeres como por otros hombres.
Este cambio fue descrito como un “efecto del alcohol”, que reduciría significativamente la inhibición, la ansiedad social y modificaría la percepción de la realidad.
“El alcohol tiene la capacidad de desdibujar las barreras conductuales establecidas socialmente, generando conductas que en estado sobrio serían consideradas inusuales o poco probables”, señala el estudio.
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Los investigadores concluyeron que el alcohol puede provocar una disminución de las barreras psicológicas relacionadas con la orientación sexual, haciendo que algunos hombres heterosexuales sientan atracción por personas del mismo sexo en situaciones específicas, como aquellas en las que el consumo de licor es elevado.
Esta no sería una señal de cambio permanente en la orientación sexual, sino una conducta situacional influenciada por el estado de embriaguez.
El estudio resalta que este fenómeno no implica que los participantes dejaran de identificarse como heterosexuales.