Foto: EFE
Actualizado: 29 de abr, 2016
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Por la fascinación de muchas personas en Japón de tener como mascotas a insectos, ahora está tomando fuerza una nueva tendencia.
Se trata de "kimo-kawa" y consiste en introducir insectos en la piel de las personas, tal como se hace con un arete o un pearsing para tener colgada a su mascota todo el tiempo.
Son tarántulas, ciempiés o escarabajos gigantes que luego de ser disecados se convierten en joyas para llevar sobre alguna parte del cuerpo.
Ahora en las tiendas de Village Vanguard de ese país oriental se ofrecen los pendientes que tienen un precio que oscila en los 1898 yenes.
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