Muere hombre de 35 años tras desmayarse frente a su esposa al cruzar la meta de carrera
Un hombre de 35 años colapsó frente a su esposa tras cruzar la meta de una carrera. Lo que parecía solo un desmayo terminó en tragedia.
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Lo que debía ser una jornada de alegría y celebración terminó convirtiéndose en una escena trágica, cuando un hombre de 35 años colapsó frente a su esposa tras completar una carrera recreativa.
El hecho ocurrió ante decenas de personas que presenciaban la llegada de los corredores, incluyendo familiares y amigos del participante, quienes quedaron desconcertados por lo sucedido.
El trágico episodio tuvo lugar el pasado miércoles 30 de julio en Thiene, un municipio ubicado en el norte de Italia. La víctima, identificada como Mattia Sella, participaba en la ‘CorrinConca’, una tradicional carrera a pie de unos ocho kilómetros.
Apenas cruzó la línea de meta, se desplomó en el suelo mientras era observado por sus seres queridos. Al principio, algunos pensaron que se trataba de un simple desmayo provocado por el cansancio o el calor, pero rápidamente quedó claro que su condición era crítica.
Sella, quien no tenía antecedentes médicos conocidos, había presentado un certificado de salud para inscribirse, tal como exige la organización del evento, que está a cargo de la parroquia local.
A pesar de que personal médico y voluntarios de la Cruz Roja actuaron de inmediato, practicando maniobras de reanimación cardiopulmonar durante más de 40 minutos, los esfuerzos resultaron infructuosos y finalmente se declaró su muerte por un paro cardíaco.
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El alcalde de Thiene, Giampi Michelusi, se acercó al lugar poco después del suceso. “Lo conocía desde hace años, vivía a cincuenta metros de mi casa. Era un muchacho amable, educado. Es una tragedia inmensa”, expresó, visiblemente afectado.
Hasta el momento, los organizadores del evento no han emitido un comunicado oficial, pero la comunidad se ha volcado en muestras de solidaridad con la familia, profundamente golpeada por la inesperada pérdida.
La autopsia será clave para determinar si existía alguna afección cardíaca no diagnosticada previamente. Mientras tanto, el pueblo permanece en duelo por la sorpresiva partida de uno de sus habitantes más queridos.