Supuesta disculpa de Andy Byron, CEO infiel del concierto de Coldplay: revelan la verdad

Lo que parecía ser una velada inolvidable con música y emoción terminó convirtiéndose en el epicentro de un escándalo que sacude al mundo empresarial en Estados Unidos. Andy Byron, CEO de la empresa de tecnología Astronomer, protagonizó un bochornoso episodio durante un concierto de Coldplay en Boston, el pasado miércoles 16 de julio.La polémica comenzó cuando la tradicional "Kiss Cam" enfocó al ejecutivo en un momento de evidente complicidad con Kristin Cabot, directora de recursos humanos de su compañía. La pareja fue captada abrazada y sonriente mientras sonaba 'Viva la Vida', pero al notar que estaban siendo proyectados en pantalla gigante, su reacción fue reveladora: ella se cubre el rostro y él intenta desaparecer agachándose.Las imágenes no tardaron en viralizarse, y con ellas, estalló el escándalo. La razón: Byron está casado con Megan Kerrigan, con quien tiene dos hijos y comparte una lujosa vivienda en Massachusetts. Supuesta disculpa del CEO de AstronomerA través de redes sociales se viralizó un supuesto comunicado que habría compartido Andy Byron, el cual señala:“Quiero reconocer el momento que ha estado circulando en línea y la decepción que ha causado. Lo que se suponía que sería una noche de música y alegría se convirtió en un error profundamente personal que se desató en un escenario muy público. Quiero pedir perdón a mi esposa, a mi familia y a mi equipo. Les he fallado en lo personal y en lo profesional”.No obstante, se conoció que dicho comunicado sería falso y el CEO de Astronomer no ha publicado nada aún sobre el incidente que protagonizó con su empleada.Como respuesta al incidente, la banda británica anunció que en sus próximos conciertos implementará una zona libre de cámaras para proteger la privacidad de sus asistentes.Por ahora, Megan Kerrigan ha optado por desaparecer del radar digital, cerrando sus redes sociales. Mientras tanto, el video continúa circulando por internet, generando opiniones divididas entre quienes condenan la infidelidad y quienes critican la exposición pública del hecho.