En un conmovedor acto de amor y cuidado, el valiente padre de las gemelas Sophia y Rose, Nick Keenan, dejó un legado imborrable antes de partir de este mundo a causa de un glioblastoma, un agresivo cáncer cerebral. Aunque su presencia física se apagó, su espíritu quedará presente en cada uno de los cumpleaños de sus pequeñas hijas gracias a las cartas de felicitación que les dejó, con la esperanza de que ellas sepan lo mucho que las amó y las acompañe en su crecimiento.
La historia de Nick y su familia, originaria del Reino Unido, comenzó en 2015 cuando le diagnosticaron un tumor cerebral del tamaño de una pelota de tenis. Ante esta dura noticia, el valiente padre se sometió a procedimientos quirúrgicos y tratamientos invasivos, mientras continuaba trabajando a pesar de la radioterapia y quimioterapia. Su determinación y fuerza eran un pilar fundamental para su familia, que encontró esperanza en la idea de tener hijos.
En 2019, su hogar se llenó de alegría con la llegada de las gemelas Sophia y Rose, fruto de un exitoso tratamiento de fecundación in vitro. Sin embargo, la felicidad se vio empañada cuando, a los seis meses de edad de las gemelas, Nick empezó a mostrar problemas en el habla. Tras varias consultas médicas, llegó el devastador diagnóstico: un glioblastoma, un tumor cerebral altamente maligno.
El mundo se oscureció para la familia en marzo de 2020, justo cuando la pandemia de COVID-19 comenzaba a asolar el mundo. Nick enfrentó la enfermedad con valentía y se sometió a ensayos clínicos, pero el pronóstico no fue alentador. Nueve meses después, el padre amoroso falleció, dejando un vacío irremplazable en el corazón de su esposa Victoria y de sus dos pequeñas hijas.
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Antes de partir, Nick dejó una carta para cada uno de los futuros cumpleaños de Sophia y Rose. Estas cartas, llenas de amor y esperanza, serán una manera de estar presente en los momentos especiales de sus hijas durante los próximos 30 años.
"Con suerte, les dará una mejor idea de dónde estaba en esa etapa de su vida", expresó Victoria, la viuda de Nick, quien ahora lucha junto a organizaciones médicas para aumentar la investigación científica sobre tumores cerebrales. Su objetivo es encontrar respuestas y avances que ayuden a otras familias a enfrentar esta devastadora enfermedad.
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La historia de Nick Keenan es un recordatorio poderoso de la importancia de amar y valorar cada momento con nuestros seres queridos. Su valentía al enfrentar la adversidad y su deseo de dejar un legado de amor y cuidado a sus hijas son un ejemplo inspirador para todos nosotros. Que su memoria y sus palabras perduren en el corazón de Sophia y Rose, y que su historia impulse una mayor conciencia y apoyo para la investigación médica que busca vencer a esta cruel enfermedad. En la celebración de cada cumpleaños, estas cartas serán un tesoro invaluable que recordará a las gemelas cuánto fueron amadas por su valiente y cariñoso padre.
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