La incertidumbre y el temor se han apoderado de la familia del economista Rodrigo Cabezas, exministro de Finanzas durante el gobierno de Hugo Chávez, tras su detención por el SEBIN (Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional) el pasado jueves en Maracaibo. Desde entonces, no se tiene información precisa sobre su paradero ni sobre su estado de salud, lo que ha llevado a sus familiares a calificar el hecho como una posible desaparición forzada, sumándose a las denuncias de otras familias venezolanas que atraviesan situaciones similares.
En entrevista con Venezuela al Día, Rodna Cabezas, hija del exfuncionario, expresó su angustia: “Mi papá fue detenido el día jueves en la ciudad de Maracaibo, donde él reside, por funcionarios del SEBIN. Y hoy, ya 120 horas después de su detención, no sabemos dónde está”. La joven exigió a las autoridades, especialmente al fiscal general de la República, que informen sobre el lugar de reclusión de su padre y el motivo de su aprehensión.
Traslado sin información y problemas de salud: una denuncia que crece
Según relató Rodna, tras su captura, Rodrigo Cabezas habría sido trasladado a Caracas, aunque hasta la fecha los intentos de la familia por confirmar su ubicación han resultado infructuosos. “El día viernes me volví a dirigir al SEBIN en Maracaibo y no he podido dar con su paradero. Le exijo al fiscal que me indique dónde está mi papá, a dónde se lo llevaron y cuál fue el motivo de su detención”, afirmó.
La preocupación se intensifica debido a las condiciones médicas del exministro, quien padece una patología cardíaca, tiene un stent coronario y requiere tratamiento diario para controlar la hipertensión arterial.
“No sé si los medicamentos que logramos hacerle llegar se los dieron, no sé si los está tomando”, agregó su hija, en un llamado a que se respeten los derechos humanos y el debido proceso.
El perfil de un crítico: de ministro a opositor del modelo económico
Rodrigo Cabezas, conocido por su larga trayectoria académica como profesor universitario y su paso por la administración pública, se había distanciado del gobierno de Nicolás Maduro desde 2017. Como lo recordó su hija, “Mi papá siempre dio su opinión sobre la política monetaria del país, nunca se exilió ni pensó en hacerlo. Es un hombre de principios”.
Cabezas, que fue ministro de Finanzas y presidente de la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional, se mantuvo en Maracaibo dedicado a la docencia en la Universidad del Zulia. Su crítica al modelo económico actual, sobre todo en materia monetaria, lo convirtió en una figura incómoda para el oficialismo. Sin embargo, hasta ahora no se conocían amenazas directas en su contra. “Que yo te diga que hubo una amenaza directa, no”, respondió Rodna ante la consulta.
Un patrón de detenciones y denuncias de desapariciones forzadas
El caso de Rodrigo Cabezas se suma a un patrón que organismos de derechos humanos han venido documentando en Venezuela: la detención de personas sin información clara de su paradero ni de los cargos que se les imputan. “Primero no se sabe quiénes los detienen, pasan días enteros sin que los familiares tengan información, y por eso se habla de desapariciones forzadas”, comentaron los periodistas durante la entrevista.
La familia Cabezas ha acudido al Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo y los tribunales para introducir denuncias y exigir respuestas. “Hemos estado haciendo el acompañamiento correspondiente en las instituciones competentes para que se respete el debido proceso y los derechos de mi papá”, afirmó Rodna.