En ese sentido, Nicolás Uribe manifestó que "pedir que se quite de lista de terroristas a un grupo que está en proceso de desaparecer es irrelevante". En el sentido de que de firmarse un acuerdo, las Farc como organización armada desaparecerían. Además mencionó que “el tema de quitarle el mote de terrorista a las Farc no debería ser una cuestión a la cual se debiera acceder” (Lea también: Farc pide a Parlamento Europeo que la retiren de lista de terroristas).
En contraste, Sandra Borda consideró que se debe considerar que si se llega a firmar la paz, las Farc dejarán de ser un grupo armado y que es coherente dejarlos de nombrar un grupo terrorista cuando sean fuerza política: “es importante hacer un poco de historia y mirar cuál fue el proceso a través del cual entraron las Farc a ser un grupo terrorista. Ante esto, indicó que “el hecho de que saquen o no de la lista a las Farc, no le va a borrar la memoria a nadie sobre los actos terroristas que ellos han cometido”.
Néstor Morales destacó los casos de Yasir Arafat, Nelson Mandela, Gerry Adams y Pepe Mujica, quienes se destacaron como figuras políticas de su país, pero que tuvieron un pasado en el que se les adjudicó el calificativo de guerrillero. “El mundo y los procesos de paz están llenos de ejemplos de personas que eran terroristas”, dijo (Lea también: Apoyo de Celac a misión especial hace irreversible este proceso de paz: Santos).
Asimismo, Vanessa de la Torre comentó el reciente caso de Cuba, en donde se le retiró del listado de países que apoyan el terrorismo gracias a las conversaciones establecidas entre el gobierno estadounidense y el oficialismo de Cuba.
Juan Lozano expresó que debe tenerse en cuenta como se mantienen las actividades de las Farc. “La diferencia hoy tiene que ver con la reiteración de conductas que siguen generando tránsitos delictivos y criminales”, por lo que añade que el proceso de paz parte de la premisa de nada está acordado hasta que todo esté acordado.