"En cuerpo ajeno", editorial de Ana Cristina Restrepo

Este es el Editorial de Ana Cristina: "Como muchas novias, el día de su boda, Jeni Stepien quería llegar al altar acompañada de su padre. Cuando su novio le propuso matrimonio, Jeni se sintió devastada ante la posibilidad de no tener a su papá, quien había sido asesinado hacía diez años, víctima de un asalto. Aquel día fatal en que Jeni quedó huérfana, su familia donó los órganos de su padre al Centro para la Recuperación de Órganos y Educación. El receptor del corazón fue el señor Arthur Thomas. Jeni se dio a la tarea de buscar a Thomas y le escribió: “Querido Tom, soy la hija del hombre cuyo corazón está dentro tuyo y me voy a casar el 6 de agosto (...) ¿Me acompañarías hasta el altar?”. Arthur Thomas, el receptor del corazón del padre de Jeni, aceptó la invitación. Viajó desde Nueva Jersey hasta Pensilvania para conocer a Jeni y llevarla “de gancho” al altar, en la misma iglesia en la cual sus padres se habían casado. Esta es solo una de las historias hermosas que hay detrás de la donación de órganos. Por cada donante de órganos y tejidos se pueden beneficiar más de 55 personas. Después de recibir la sanción del presidente Juan Manuel Santos, entró a regir en Colombia la Ley de donación de órganos. De acuerdo con esta norma, todo ciudadano colombiano es donante de órganos a menos de que en vida haya manifestado lo contrario. La novedad de esta ley de donación de órganos es que elimina la autorización de los familiares. Con esta ley aumenta la posibilidad de vida de aquellas personas que requieren trasplantes. Hoy, en Colombia, más de 2 mil personas esperan la donación de un órgano. A diciembre de 2015 la cifra de pacientes ascendía a 2.162. El riñón y el hígado son de los órganos más demandados y solo los donantes representan un 5 % del número de personas que necesitan un trasplante. En Colombia se encuentran habilitados únicamente 26 clínicas y hospitales con programa de trasplante e inscritos ante la Red para realizar estos procedimientos. La nueva ley establece un plazo de 6 meses a los entidades para que pongan en marcha las medidas que se requieren para aplicar la normativa. Que muchas historias como la de Jeni se repitan. La donación de órganos es un acto desinteresado y altruista, no trae remuneración o retribución para el donante o su familia. Donar órganos es ofrecer posibilidades de vida".