El contratista Julio Gómez, quien se encontraba pagando su condena por el carrusel de la contratación en los calabozos del DAS, a cargo de la Fiscalía, permanece desde el sábado en cuidados intensivos por una peritonitis.
Según fuentes cercanas al contratista, ese día Gómez sintió un dolor intenso en el estómago y aunque se lo comunicó al jefe de celdas fue trasladado horas después cuando sufrió un desmayo.
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Llegó a la clínica con un paro cardiorrespiratorio, lo reanimaron y los médicos diagnosticaron que se le había explotado el apéndice. Ya era peritonitis gangrenal y tenía el estómago infectado. Desde ese momento se encuentra en cuidados intensivos, entubado, con pronóstico reservado.
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