La reanudación de las labores de dragado mejoraron las condiciones en el canal navegable de Barranquilla, al punto que la Dirección General Marítima aumentó el calado operativo de 8 a 8.5 metros a partir de los resultados de los más recientes estudios batimétricos practicados en este tramo final del río Magdalena.
La Dimar explicó que, de esta manera, los buques con una longitud entre 150 y 180 metros y un calado hasta de 8.5 metros pueden operar sin restricciones en esta zona. Sin embargo, las embarcaciones con una eslora superior a los 180 metros y un calado de 8.5 metros solo pueden operar en el canal con luz día.
La semana pasada las profundidades del canal de acceso al puerto de Barranquilla descendieron considerablemente, debido a la suspensión de los trabajos de mantenimiento, ya que la draga se averió y solo pudo ser reparada el pasado viernes.
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Ahora, aunque se retomó el dragado, las condiciones de navegabilidad para la entrada y salida de buques de mercancía no son lo suficientemente óptimas, ya que para ello el calado debe superar los 10 metros.
"Se procederá a realizar análisis en la maniobrabilidad de cada embarcación que se encuentre sobre los límites máximos permitidos y se estará notificando sobre los avances del sector de acuerdo con las intervenciones y afectaciones que se presenten, asimismo, se comunicarán previamente las consideraciones de seguridad que requieran ser adoptadas", dijo la Dimar, a través de un comunicado.
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