La comunidad del barrio La Bendición de Dios, de Barranquilla, aseguró que semanas antes de quedarse sin el fluido eléctrico,
uno de los transformadores del sector expulsaba chispas y aceite caliente, por lo que decidieron reportar la anomalía ante la empresa Electricaribe. Sin embargo, denuncian que la compañía no atendió el caso de manera oportuna y, desde el pasado 3 de enero,
el transformador explotó y dejó sin energía a más de 800 personas que habitan en esa comunidad. Jesús Díaz, vicepresidente de una fundación del barrio
, asegura que al menos 200 niños ya comienzan a sufrir las consecuencias de la ausencia del fluido eléctrico.
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“Casi todo el barrio está sin luz, la gente está tensa. Los niños y ancianos están desesperados.
Presentan un brote y no se pueden preparar los alimentos”, detalló Diaz. Por su parte,
Electricaribe informó que en el barrio hay 309 familias que a la fecha tienen una deuda con la empresa superior a los $565 millones. Ramiro Castilla Andrade, gerente de Electricaribe en Atlántico norte,
indicó que “los sectores eléctricamente subnormales tienen redes antitécnicas, que son construidas por la misma comunidad”. La empresa aseguró continuar en la búsqueda de un acuerdo con los líder
es y la comunidad del barrio La Bendición de Dios de Barranquilla.
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