En delicado estado de salud se encuentra un joven monteriano, de 19 años, al que le explotó una carpeta de pólvora que tenía guardada en un bolsillo del pantalón junto a su celular, en momentos en los que, al parecer, el teléfono sonó y activó el dispositivo que terminó provocándole heridas en sus partes íntimas y afectaciones en la vista, pues uno de sus ojos se vio gravemente comprometido.
El hecho se registró sobre la tarde del pasado lunes, en el barrio El Tambo de Montería, mientras se encontraba en plena vía pública, sin imaginarse que el dispositivo le explotaría tras una reacción por la vibración de su celular, el cual se encontraba en el mismo bolsillo en el que contenía la carpeta de pólvora, tratándose de un elemento tipo papeleta triangular con mecha.
De alguna manera, la detonación habría sido provocada por el mismo teléfono celular del joven, según la información que entregó el coronel Gabriel García, comandante de la Policía Metropolitana de Montería.
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“Es lamentable porque el joven no se imaginó que la vibración iba a generar la explosión de la capeta con pólvora, por eso reiteramos el llamado para que los niños, niñas y jóvenes eviten manipular estos elementos, ya que las heridas que producen dejan marcas para toda la vida".
El joven, quien al parecer había comprado la pólvora para revenderla, se encuentra en cuidados intermedios en la Clínica Central de Montería, donde se ha salvado, pero no del enérgico regaño que envió su abuelo José Fidel Herrera Aguilar a los jóvenes que, como él, exponen su vida con la manipulación de pólvora en medio de las festividades de Navidad y Año Nuevo.
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"Yo a los jóvenes les mando el mensaje de que eso es una pendejada. Con eso no se juega, la vida es sagrada, los jóvenes no deben usar ni una papeleta ni media ni nada", expresó.
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