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La demanda penal surte contra el alcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández y el director de Tránsito, Miller Salas, por haber demorado 12 días en revocar la medida del pico y placa en el centro de la cuidad como lo había exigido en un fallo de tutela una juez de la república.
El abogado demandante, Jorge Sánchez, aseguró que el alcalde y el director de tránsito se hicieron “los pingos” al no acatar la orden judicial.
“Los funcionarios, según la demanda, cometieron dos delitos de tipo penal, fraude a resolución judicial y prevaricato por acción, por eso los demande ante la fiscalía”, señaló el abogado.
Se está a la espera de un pronunciamiento de la Fiscalía en torno a este caso.
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