En medio de grietas, humedad y del agua cada vez que llueve, tienen que recibir clases 1.200 estudiantes del colegio Integrado Madre de la Esperanza de Sabana de Torres, Santander, que a diario están en riesgo por el grave deterioro de la institución.
Representantes del Gobierno escolar denunciaron que por años han puesto en conocimiento de la alcaldía la situación, pero sus voces poco han sido escuchadas.
“Es preocupante y vergonzoso a la vez, ver como estamos recibiendo las clases en las condiciones que estamos, nuestros techos están a punto de colapsar, hay goteras en cada salón”, expresó Jeison Peña, personero del colegio Madre de la Esperanza.
La situación se agrava en temporada de lluvias porque los estudiantes de ambas jornadas deben recibir clases en medio del agua.
“En esta temporada de lluvias cada vez que se presenta un aguacero deben salir de las aulas o en el peor de los casos, estudiar en medio de los charcos”, dijo el personero estudiantil.
Según la Secretaría de Educación de Santander fue por la queja de los estudiantes que se enteraron de las condiciones del colegio y aún esperan que la Alcaldía de Sabana de Torres entregue un plan de obras para recuperarlo.
“Que nos presente un proyecto de infraestructura para que el gobierno departamental pueda apropiar los recursos y poder recuperar esta institución educativa que se encuentra en un estado lamentable”, confirmó Ismael Ibáñez, director administrativo de la Secretaría de Educación de Santander.
Como medida preventiva, la Secretaría de Educación le pidió a la alcaldía de Sabana de Torres la evacuación de los estudiantes afectados de manera inmediata para reubicarlos en otro lugar.
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