Los dos buses AN1 y P2 del Sistema de Transporte Masivo, Metrolínea, cubrían las rutas Las Hamacas, sector norte de Bucaramanga y San Francisco, en el centro de la ciudad, cuando fueron atacados con piedras por desconocidos.
Ambos vehículos quedaron con los vidrios panorámicos y ventanas laterales partidas producto del ataque que, según informó Metrolínea,correspondería a actos de vandalismo.
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En el ataque, uno de los conductores resultó con heridas en sus brazos porque los vidrios le cayeron encima.
Metrolínea denunció lo ocurrido a través de un comunicado, en el que además anunció retrasos en la operación hacia los barrios que cubrían ambas rutas mientras son reparados los vehículos.
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