“Mi padre fue socio fundador del Club de Tiro Barranquilla y nos inculcó, tanto a mis hermanos como a mí, a practicar este deporte. Los tres entonces representábamos a Colombia en muchos eventos mundiales. Al principio lo practicaba fines de semana y después profesionalizamos el entrenamiento”, contó.
En ese mismo año de estos juegos sucedió la masacre de Múnich y el deportista contó cómo se vivió esto para los que estaban en competencia.
“Ya algunos tiradores habíamos salido de la villa el día que ocurrido. El secuestro fue en una noche para la madrugada y nosotros salimos al día siguiente. Si vimos la tensión que había, hasta llegamos a pensar que iban a detener los juegos, pero menos mal continuaron para evitar posteriores actos terroristas”, dijo.
Bellingrodt además explicó la importancia de la mentalidad para lograr éxitos deportivos en la competencia.
“Para eso son los entrenadores y los psicólogos, porque no solo el entrenamiento físico sino también la preparación mental. En Colombia hasta hace poco no se ponía atención real a lo que es el desarrollo mental en un competencia, cualquiera que sea. La preparación mental influye mucho y si uno no desarrolla ese manejo es muy difícil que pueda triunfar en alguna prueba”, aseguró.