Colombia atraviesa un momento clave: se acerca la confirmación del aumento del salario mínimo, un dato que influye directamente en el costo de vida, el valor de la canasta familiar, el transporte y, por supuesto, en el precio del arriendo mensual.
El incremento de los precios ha llevado a que muchas personas reconsideren sus decisiones de vivienda. Con los créditos hipotecarios en niveles altos, elegir entre arrendar o comprar una casa se ha vuelto un tema importante, especialmente para quienes buscan estabilidad financiera sin endeudarse a largo plazo.
Según datos de Fincaraiz, más del 70 % de la demanda habitacional en Colombia se concentra en vivienda usada y arriendos. Esta tendencia refleja no solo el impacto económico actual, sino también los cambios en los hábitos de vida y en la manera de proyectar el futuro.
¿Es mejor arrendar o comprar casa en Colombia hoy?
La respuesta depende del bolsillo y del estilo de vida de cada persona. Comprar vivienda sigue siendo el sueño de muchas familias, pero el costo del crédito hipotecario ha limitado ese objetivo, pues las cuotas mensuales resultan cada vez más altas.
Actualmente, las tasas de interés superan el 13 % anual en varios bancos, lo que implica que una persona podría terminar pagando hasta el doble del valor real del inmueble al finalizar el préstamo. Ante este panorama, arrendar se ha convertido en una opción más práctica y financieramente sensata.
El arriendo ofrece estabilidad en el canon mensual y permite planear gastos sin la presión de una deuda de largo plazo. Además, brinda flexibilidad a jóvenes profesionales y familias que se trasladan entre ciudades o buscan ajustar su vivienda según su trabajo o necesidades.
En contraste, la compra de vivienda nueva ha perdido impulso, mientras que la vivienda usada mantiene un mercado sólido, con precios más competitivos y ubicaciones consolidadas. Esto demuestra que el mercado colombiano se está orientando hacia alternativas más adaptables y sostenibles, que favorecen la estabilidad económica.
Ciudades donde arrendar sigue ganando terreno
De acuerdo con Fincaraiz, Bogotá lidera la demanda nacional de arriendo, seguida por Medellín, Cali y Barranquilla. Sin embargo, las ciudades intermedias —como Pereira, Manizales y Villavicencio— empiezan a destacar por su menor costo de vida, mejor calidad ambiental y aumento en la oferta de empleo remoto.
En los estratos medios (3 y 4), el mercado de arriendos en Bogotá es más dinámico, mientras que en los estratos 4 y 5 los cánones mensuales oscilan entre $2,5 y $3,5 millones. Es una cifra que muchos prefieren asumir por la ubicación y la comodidad, antes que comprometerse con un crédito a varias décadas.