Congresistas radicarán proposición para bajar 40 billones de pesos el presupuesto
Plantearon múltiples preocupaciones por las cifras expuestas por el Gobierno y los sectores que serán afectados por la ley de financiamiento.
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El debate sobre el Presupuesto General de la Nación para 2026 comenzó en las comisiones económicas conjuntas del Congreso con fuertes cuestionamientos. Varios senadores y representantes a la Cámara expresaron preocupaciones por el incremento en el monto propuesto y por la falta de detalles sobre los ingresos esperados a través de la nueva reforma tributaria.
Según lo presentado por el Gobierno, el presupuesto asciende a 557 billones de pesos, acompañado por una ley de financiamiento adicional por 26 billones. Estas cifras han generado inquietud entre los congresistas que cuestionan el sustento de tales recursos y la distribución del gasto.
Uno de los principales puntos de controversia gira en torno al gasto de funcionamiento. De acuerdo con los datos oficiales, más de 366 billones de pesos estarían destinados a ese rubro, cifra que ha sido objeto de críticas por parte de diferentes bancadas.
El senador Efraín Cepeda aprovechó para advertir que en el proyecto se plante un aumento de 27 billones de pesos de gastos de funcionamiento, justo el último año de gobierno y en medio de la contienda electoral. También reprochó que la reforma tributaria representa “un cheque en blanco por los recursos de capital de más de 8 billones de pesos”.
Cepeda también enfatizó que “el Congreso no puede girar ese cheque a ciegas” cuando el proyecto de ley aún no ha sido radicado oficialmente.
Desde el Gobierno, se ha señalado que la canasta familiar no sufrirá afectaciones, aunque sí se reconocen ajustes en el Impuesto al Valor Agregado (IVA) aplicable en ciertos sectores. Estos cambios están contemplados en la nueva iniciativa tributaria.
Entre los ajustes propuestos por el ejecutivo se incluye una mayor progresividad en los impuestos sobre la renta y el patrimonio, nuevos tributos al tabaco y al alcohol, así como modificaciones en los gravámenes al carbono y al consumo. Sin embargo, la estructura detallada de la propuesta no ha sido socializada completamente.
El senador Ciro Ramírez criticó el incremento del presupuesto en comparación con el año anterior. “El último presupuesto fue de 350 billones. Hoy el Gobierno Petro le pide a los colombianos que le aprueben 200 billones más”, afirmó durante su intervención en la sesión conjunta realizada en el salón elíptico.
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Ramírez también hizo referencia al comportamiento fiscal del país durante el primer semestre del 2025.
“Los resultados del primer semestre del 2025 arrojaron el peor déficit fiscal del siglo”, aseguró y dijo que este se ubica en el 3,8 % del PIB frente a un promedio histórico de 0,98 %.
Frente a este panorama, el senador anunció la radicación de una proposición para reducir el monto total del presupuesto en 40 billones de pesos. La medida busca ajustar el gasto público y establecer prioridades más claras en la ejecución de los recursos.
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En la misma línea, el representante Christian Munir Garcés propuso una reducción cercana a los 39 billones de pesos. “El monto del presupuesto de 2026 debe ser recortado en 39 billones de pesos”, manifestó durante el debate.
Garcés explicó que, del total contemplado, 366 billones están dirigidos al funcionamiento del Estado, $102 billones al pago del servicio de la deuda y solo $89 billones se destinaría a inversión. Esta distribución fue señalada como un motivo de preocupación por parte del legislador.
Según el representante del Centro Democrático, el Gobierno no adoptó medidas para frenar el crecimiento del gasto operativo. “Presentaron proyectos de ley, algunos aprobados, como la reforma pensional y la reforma de la salud, que aumentan los gastos de funcionamiento”, añadió.
Los congresistas solicitaron al Ministerio de Hacienda y al equipo económico del Gobierno mayor claridad sobre los ingresos proyectados en la reforma tributaria y el impacto fiscal de las nuevas leyes aprobadas. Mientras tanto, continúa el estudio detallado del presupuesto en el Congreso.
Las discusiones avanzan con la expectativa de que el Ejecutivo entregue información más precisa sobre las fuentes de financiación y el destino del gasto. Las comisiones económicas deberán analizar las propuestas de recorte antes de emitir un concepto definitivo sobre el proyecto.