La muerte de Valeria Afanador, la menor de 10 años hallada sin vida en Cajicá el pasado 29 de septiembre de 2025, tras permanecer desaparecida por 18 días, sigue generando interrogantes sobre las circunstancias de su muerte.
La niña desapareció el 12 de agosto de 2025 mientras se encontraba en el Gimnasio Campestre Los Laureles. Pese a que una intensa búsqueda que involucró a familiares, bomberos, Defensa Civil y más de 4.000 personas, se concentró en el Río Frío desde el primer día, el cuerpo fue encontrado flotando apenas a 200 metros del colegio.
En entrevista con la serie Relatos al Límite, conducida por el periodista Felipe García, de Blu Radio, Manuel Afanador, padre de la menor, señaló el hallazgo como una inexplicable inconsistencia, pues "pasamos por esa zona más de 100 veces".
Las dudas de la familia Afanador se centraron en el informe de Medicina Legal, que apunta a la muerte por ahogamiento. El padre reveló que el cuerpo presentaba dos golpes visibles, una laceración en la mano derecha y un morado en el tórax, lesiones que Valeria "no las tenía cuando la dejamos en el colegio".
Adicionalmente, el dictamen señala la presencia de agua de pantano en sus pulmones. "El dictamen señaló la presencia de agua de pantano en sus pulmones, algo que no corresponde con las características del río Frío"
Además, Manuel añadió que "el agua de un pantano es prácticamente agua muerta, mucho barro y demás, pero el río Frío, a pesar de no ser un río de agua potable, es un río vivo, es un río que contiene algas, que contiene sedimentos, que contiene digamos que algún tipo de elementos que muy seguramente los especialistas darán darán un dictamen de decir 'es un es un río diferente".
Para la familia, estas evidencias físicas y la diferencia en el tipo de agua refuerzan la hipótesis de que Valeria no salió sola del colegio y que hay "manos criminales detrás del caso".
El caso también ha expuesto severas fallas de seguridad en el Gimnasio Campestre Los Laureles, donde Valeria fue vista por última vez caminando sola antes de acercarse a una zona de rejas. "Sabemos que empezaron la búsqueda con otros niños, lo cual nos parece muy muy delicado", denunció.
Aunque la Fiscalía ha adelantado labores de entrevistas y análisis de cámaras, el proceso investigativo es percibido por la familia como lento y sin "conclusiones claras".