La escultura ‘Medusa con la cabeza de Perseo’ del argentino Luciano Garbati, emplazada frente a los tribunales de Nueva York donde fue procesado Harvey Weinstein, se convirtió en un símbolo del movimiento Me Too.
Se trata de una obra que invierte la tradicional escultura de Perseo con la cabeza de Medusa.
Según la mitología griega, Medusa resguardaba el templo de Atena, pero tras ser violada por el dios Poseidón, fue castigada por Zeus, que la responsabilizó del acto, le quitó todos sus privilegios y reemplazó su atractivo cabello con un nido de serpientes.
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Medusa quedó embarazada y según la tradición griega fue decapitada por Perseo hijo de Zeus con la mortal Dánae.
La nueva resignificación que plantea la obra de Garbati ha llamado la atención de activistas, pero también de turistas que han convertido la escultura en un homenaje a las víctimas de violación y agresión sexual.
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