Hombre arrojó al río a su hija recién nacida, luego de asesinar a su pareja: insólito motivo
El hombre mantenía una relación paralela con otra mujer y sus declaraciones causaron terror en la comunidad.
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El mundo está conmocionado tras un estremecedor caso que sacudió a Memphis, Estados Unidos. El hombre, identificado como Brandon Isabelle, de 28 años, fue acusado de asesinar a su pareja, Danielle Hoyle, y, además, de acabar con la vida de su hija recién nacida de apenas dos días.
Según las primeras versiones, el hombre habría tomado a la bebé y la arrojó al río Misisipi, una zona conocida por la presencia de caimanes. El hecho generó indignación en la comunidad, que exige justicia y medidas drásticas para evitar que una tragedia similar vuelva a repetirse.
De acuerdo con las investigaciones, Isabelle citó a su pareja en un punto de la ciudad donde le disparó en la cabeza. Posteriormente, trasladó a su hija, Kennedy, hasta Mud Island, un sector ribereño, y allí la arrojó al río. La policía informó que el cuerpo de la pequeña no pudo ser hallado pese a los operativos desplegados en la zona.
Durante el juicio, el fiscal Dru Carpenter presentó pruebas que calificó como irrefutables. Entre ellas se encuentran grabaciones en las que el propio acusado confiesa lo ocurrido, además de registros de cámaras de videovigilancia, análisis genéticos y testimonios de allegados.
La Fiscalía señaló que Isabelle mantenía una relación paralela con otra persona y que, al enterarse del nacimiento de Kennedy, decidió terminar con la vida de la madre y la hija para evitar responsabilidades. Su explicación dejó atónitos a los presentes cuando afirmó simplemente que “no la quería”, una frase corta pero devastadora que reflejó la frialdad con la que actuó contra su propia hija.
La comunidad de Memphis ha reaccionado con dolor e indignación. Vecinos y allegados realizaron homenajes en memoria de Danielle Hoyle y de la pequeña Kennedy, colocando flores y velas en los lugares donde ocurrió la tragedia.
Estos actos simbólicos se han convertido también en un llamado de atención a las autoridades locales para reforzar los mecanismos de protección hacia mujeres y niños en riesgo. La exigencia es clara: garantizar justicia y establecer medidas efectivas que eviten que crímenes de esta magnitud vuelvan a repetirse en la ciudad.